Las claves de la muerte de Osama Bin Laden

• Se ha acabado con el terrorista más buscado pero quedan dudas por resolver
• La operación ha puesto en entredicho el papel de Pakistán 

La muerte de Bin Laden ha sorprendido al mundo. El día 2 de mayo pasará a la historia como el momento en el que el terrorista más buscado perdía la vida a manos de las fuerzas estadounidenses.

Pese al secretismo que ha rodeado la actuación, hay puntos clave que han trascendido y que deben ser tenidos en cuenta. Estas son las claves de una operación que ha terminado con el enemigo número uno de Estados Unidos desde hace años.

¿Dónde se encontró a Bin Laden?

Abbottabad, a unos 100 kilómetros de la capital de Pakistán,  era el lugar en el que el líder de Al Qaeda vivía. La localidad se caracteriza por ser, esencialmente, una zona militar ya que en ella se encuentra una academia del ejército y gran parte de la tierra es de la propiedad o es controlada por el ejército paquistaní y oficiales retirados.

Aunque la ciudad, fundada por James Abbott en el año 1853, está técnicamente en lo que solía llamarse Provincia de la Frontera del Noroeste, se encuentra en el extremo oriental de la provincia, 120 kilómetros al norte de Islamabad y a 200 kilómetros al este de Peshawar.

La ciudad se conoce tanto en el país como en el exterior por caracterizarse por un buen clima y por contar un nivel de vida de clase media-alta. Por todo ello, ha logrado convertirse en un importante centro turístico.

Todas estas características han hecho que surjan dudas sobre cómo es posible que Bin Laden viviera allí durante seis años sin levantar sospechas y más si tenemos en cuenta que la multimillonaria mansión del líder de Al Qaeda se encuenta muy cerca de la academia militar. De hecho, los mapas de la zona muestran "áreas restringidas" que están bajo control militar próximas a la multimillonaria residencia.

Por ello, tal y como recoge el diario The New Yorker, estas circunstancias dejan lugar a varias dudas. ¿A quién pertenece la tierra en que Bin Laden construyó su casa? ¿Cómo adquirió el terreno y a quién pertenecía? ¿Quién diseñó la casa? ¿Quién instaló los sistemas de seguridad? ¿Quiénes trabajaban allí? ¿Hay testigos que hayan visto quiénes han visitado la casa, con qué frecuencia y con qué propósito?

Son preguntas al azar pero si tenemos en cuenta de quién se trata, un terrorista culpable de miles de muertes, son más que relevantes para todas las víctimas que han perdido la vida bajo las órdenes de un Bin Laden que vivía en esa casa. Pero, además, su respuesta puede dejar en evidencia a Pakistán y a sus servicios secretos, quienes ya han criticado la actuación estadounidense por considerarla "unilateral y sin autorización".

Por último, el hecho de que Bin Laden haya podido residir en este territorio paquistaní deja otra sospecha más. La de que el mulá Omar y número dos de Al Qaeda, Ayman al-Zawahiri, probablemente disfrute también de su refugio en Pakistán. De hecho, su ubicación, según fuentes estadounidenses, es de sobra conocida por algunos militares y miembros de los servicios de inteligencia paquistaníes.

Con todo, esto no dejan de ser especulaciones y estas evidencias podrían ser desmentidas y desautorizadas por una investigación independiente y transparente.

¿Con quién vivía Bin Laden?

Según los primeros informes el líder de Al Qaeda vivía en su residencia con su esposa más joven. Bin Laden, que tenía 43 años en el momento de su muerte, había vivido casi siempre rodeado de su familia e hijos, por lo que no resulta extraño que así lo estuviera haciendo incluso pese a ser un fugitivo.

Tenía cuatro esposas que, al parecer, han sido su gran apoyo. De la primera ha trascendido que era una prima de Siria. La segunda y tercera fueron educadas como mujeres sauditas. Y, por último, la cuarta, era algo así como una novia de Yemen con la que había mantenido el contacto por correo electrónico y con quien se casó cuando vivía en Afganistán durante la década de los noventa, según el exguardaspaldas del líder de Al Qaeda.

De todas ellas solo estaría junto a Bin Laden la más joven (se ha llegado a decir que se podría haber divorciado de sus mujeres más mayores) de la que han nacido múltiples rumores desde que ha muerto al lanzarse para cubrirle cuando iban a matarle hasta que recibió un impacto en el gemelo cuando trataba de escapar de las fuerzas de Estados Unidos. Con todo, Pakistán ha asegurado que la tiene bajo custodia junto a una de las hijas del líder, de unos 13 años.

Esa niña es solo una de los más de 12 descendientes, de los que uno ha muerto durante la operación estadounidense, que tenía Osama. No se conoce la cifra exacta aunque algunos de ellos han aparecido en vídeos creados por su padre, mostrándole su apoyo, y se sabe que otros han regresado a Arabia Saudita.

No sería extraño que alguno de ellos reapareciera en la lucha de la causa islámica pese a que su padre les habría pedido en su testamento que no lo hicieran.

¿Qué implica la muerte del líder de Al Qaeda?

La muerte de Bin Laden tiene un elevado componente simbólico. Es, ante todo, la venganza de un país al que el 11 de septiembre marcó un antes y un después en su historia. Pero, con todo, destaca también por lo que no es: el final de Al Qaeda.

Es una de las cosas que más se ha escuchado a los expertos una vez se ha conocido el fin de Bin Laden: habrá más terrorismo islámico. De hecho la Interpol ha sido contundente y ha alertado de la posibilidad de atentados como represalia.

Aunque eso sí, Al Qaeda ha perdido a su líder, a una figura de gran valor simbólico entre sus seguidores.

Pero la organización no se ha quedado sin "cabecilla". Todos las miradas se centran ahora en el que hasta ahora era su número dos: Aymann al Zawahiri. De hecho, ya había asumido la función de portavoz en numerosas ocasiones y en los últimos años ha llegado a difundir más mensajes y amenazas terroristas que el propio Bin Laden.

Pero también hay que tener en cuenta otro factor que favorece a Al Qaeda: su carácter regional. Desde el 11 de septiembre se sabe que la organización ha ido perdiendo, debido a la gran presión que significaba su persecución a gran escala, su estructura organizativa inicial. Ahora se caracteriza más bien por ser una organización ideológica que abarca a una cantidad de focos regionales por lo que la muerte de Bin Laden tiene un impacto simbólico para ellos pero no debería influir en gran medida en la estructura de la red que, ya de por sí, está ramificada aunque muy bien comunicada.

¿Cómo se ha desarrollado la búsqueda?

Una vez que Barack Obama asumió el cargo de presidente, él y el nuevo director de la CIA, Leon Panetta, reorganizaron el equipo de analistas encargados de encontrar a Bin Laden. Todos ellos trabajaron juntos en la planta baja de las oficinas de la sede de Langley. Eran al menos dos docenas de implicados, algunos de ellos formaban parte de una CIA que ya buscaba al líder a finales de los años noventa. Otros eran nuevos, demasiado jóvenes para haber sido profesionalmente activos cuando Bin Laden fue procesado por primera vez como fugitivo de la justicia estadounidense.

Al parecer, estos analistas estudiaron los ejemplos aportados por la historia y cómo se logró capturar a otras personas que habían sido buscados durante años por la justicia como, por ejemplo, la muerte del cartel de Medellin, Pablo Escobar en el año 1993. Basándose en estos casos se hicieron preguntas básicas y no tan básicas como, por ejemplo, cómo habían logrado avanzar en esas investigaciones, de dónde procedían sus pistas. Por ello, acotaron su búsqueda y se centraron en identificar las "firmas" del estilo de vida Bin Laden que pudieran dar datos: como, por ejemplo, dónde comparaba, si tenía alguna clase de afición y, en definitiva, cómo era su día a día.

Los analistas de Langley estaban a la cabeza de "la caza" y, junto a ellos,  unidades similares de análisis, como el Comando Central en Tampa, o la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad en Kabul. Todos ellos recapitularon las informaciones aportadas por detenidos en Irak, Afganistán y detenidos en Guantanamo tras años de interrogatorios. Con todo, aún no está claro cómo ni por qué medios se obtuvo la información ni de qué mensajero procede la pista que hallevado hasta  Abbottabad.

Con todo, estas son solo algunas preguntas de las muchas que pueden hacerse sobre esta impactante operación. Sin duda, aún falta hasta que podamos conocer toda la verdad sobre lo ocurrido en esa manisón en Pakistán y sobre como se llegó hasta ella.