Vientos de cambio en Asturias tras la irrupción del partido de Cascos en el panorama electoral

• El bipartidismo reinante en la región se tambalea, según las últimas encuestas
• Álvarez Areces, en el Gobierno desde 1999, no se presentará a la reelección
• Preocupan el aislamiento, las infraestructuras y la situación demográfica
• Consulta las biografías de los candidatos a la Presidencia de Asturias

La ruptura de Francisco Álvarez Cascos con el PP y su vuelta a la política con Foro Asrturias han revolucionado por completo las apuestas y los planteamientos electorales de cara a las próximas elecciones autonómicas del 22-M. Además, el camino para el exministro de Fomento es todavía más ancho después de que el actual presidente de Asturias, Vicente Álvarez Areces, haya decidido no presentarse a la reelección tras 12 años en el Gobierno.

Así como los comicios de 2007 apenas afectaron a la situación política asturiana -casi se clavaron los resultados de 2003-, todo apunta a que el Gobierno del PSOE se tambalea después de 12 años -incluso con el apoyo de Izquierda Unida- y a que el PP perderá votos que habría conseguido de no concurrir Foro Asturias, aunque las encuestas indican que los populares saldrán mejor parados que hace cuatro años.

Cascos, cuyas desavenencias con el PP de Asturias le llevaron a trasladar su militancia a Madrid, abandonó en enero el PP "después de 34 años de militancia ininterrumpida" por las "descalificaciones e insultos" de sus compañeros asturianos. No fue casualidad: dos días antes, la Dirección Nacional le había rechazado y había nombrado a Isabel Pérez-Espinosa como cabeza de lista.

Pérez Espinosa ha eludido en todo momento pronunciarse directamente sobre Álvarez Cascos y únicamente coloca como "adversario político" al PSOE. No obstante, en una entrevista en RNE a principios de abril, criticó "el personalismo que ha llevado a algunos a tomar decisiones".

El efecto Cascos

El enfado de Cascos con Génova y la apenas inexistente reacción de Mariano Rajoy desataron una oleada de críticas de los militantes populares en Asturias, que consideraron que la Dirección Nacional no había gestionado bien la elección del candidato para el principado. El 20 de enero, y tras varias semanas de especulaciones, se registró el nuevo partido Foro Asturias, que eligió a Cascos como presidente y candidato el pasado 5 de marzo.

No han faltado las voces de quienes se mostraron convencidos de que la entrada del exministro de Fomento en la ecuación repartiría los votos de la derecha y heriría de gravedad a los populares.

Antes siquiera de la creación del nuevo partido, Cascos se apresuró a decir que su vuelta a la política haría "una avería" al PSOE,  pero no al PP. Hay pocas encuestas, pero una de las últimas -realizada por Sigma Dos para El Mundo en abril de 2011- apunta a una caída de los dos partidos mayoritarios que perderían más de la mitad de los votos.

Así, según el sondeo, la opción de Cascos no evitaría una nueva victoria del PSOE pero sí le arrebataría 4 escaños. El partido liderado por Cascos obtendría el 24,0% de los votos y se situaría con 12 o 13 escaños y el PP, con menos votos que Foro Asturias, tendría una horquilla entre 11 y 12 diputados.

Solo Izquierda Unida y su candidato, Jesús Iglesias, se salvarían del 'efecto Cascos' y mantendrían sus tres diputados -en 2007 obtuvieron cuatro en coalición con el Bloque por Asturias, cuyo único parlamentario decidió a mitad de legislatura cambiar al Grupo Mixto-.

Ocurra lo que ocurra el 22 de mayo, el ex secretario general del PP ha anunciado ya que no tiene pensado pactar y recientemente afirmó que Foro Asturias quiere "el apoyo de los ciudadanos, no del PP".

Cambio de líder en el PSOE

La entrada de Cascos y de su partido Foro Asturias y la escisión de votantes del PP no es el único cambio al que se enfrenta Asturias en las próximas elecciones. El presidente de la comunidad autónoma,  Vicente Álvarez Areces, anunció en julio de 2010 que no se presentaría a la reelección y el nuevo candidato del PSOE a la presidencia es Javier Fernández, secretario general de los socialistas asturianos.

Puede que este cambio de canditato de los socialistas junto a la irrupción de Cascos arrastre al PSOE a su peor resultado histórico. Según la última encuesta del CIS, el Partido Socialista sería la formación más votada, con 19 escaños. El PP conseguiría 16 escaños; la formación Foro-Asturias -encabezada por Álvarez-Cascos- siete escaños; y la coalición IU/Los Verdes, tres.

Estos resultados permitirían una coalición de centro-derecha entre PP y Foro Asturias que se haría con la mayoría absoluta en el principado

Según la encuesta de Sigma Dos realizada en abril, los socialistas, que han gobernado en el Principado de Asturias durante siete de las ocho legislaturas -desde 1978 hasta 2011- (en 1995, el PP consiguió el Gobierno de la región durante cuatro años pactando con Unión Renovada Asturiana), conseguirían solo 18 o 19 diputados de los 21 que tienen actualmente.

Entre otros, Fernández se enfrenta al reto de convencer a su electorado de que es posible ahorrar en el gasto público. Álvarez Areces ha sido durante todos estos años muy criticado por el PP por haber engordado los gastos de la región en lugar de recortarlos.

El problema del aislamiento

Tanto los cuatro partidos con representación parlamentaria (PSOE, PP, IU y Bloque por Asturias) como Foro Asturias tienen muy presente en precampaña, y lo tendrán también durante la campaña electoral, el problema de infraestructuras y comunicaciones con la meseta, una vieja aspiración asturiana.

Hay dos grandes proyectos pendientes de finalizar (ambos iniciados durante la última legislatura popular, con Álvarez Cascos como ministro de Fomento): la llegada del AVE y la conocida como Autovía del Cantábrico.

El retraso en el AVE ha servido estos años como arma arrojadiza entre partidos, fundamentalmente contra el Gobierno del PSOE. A finales de marzo, el delegado del Gobierno situaba la llegada de la alta velocidad a Asturias en 2013.

Sin embargo, e incluso si se cumplen los plazos, el hecho de que el AVE llegue hasta Pola de Lena y no hasta Oviedo y Gijón también ha generado malestar: el trayecto entre Pola de Lena y las grandes ciudades asturianas se realizará en lanzaderas, a una velocidad muy inferior a la que viaja el AVE.

Por otro lado, en la Autovía del Cantábrico aún hay tres tramos por terminar (paralizados todos desde hace varios años) y también en este caso las fechas que dan unos y otros bailan. Uno de los tramos que más controversia genera es precisamente el que conecta Asturias con Cantabria (tramo Unquera-Llanes), 24 kilómetros de salto en la autopista que llevan en el mismo punto cerca de ocho años. 

La población no crece desde 1991

Otro de los grandes motivos de preocupación es la situación demográfica asturiana. La migración a otras zonas de España, la baja natalidad y la escasa llegada de inmigrantes mantienen a la población asturiana estancada desde 1991 y muchos de los mensajes de precampaña hablan de devolverle la vida a la región.

Según datos publicados por el INE, el Principado de Asturias fue en 2010 la comunidad con la menor tasa de natalidad y, a la vez, con el mayor índice de mortalidad, lo que situa a la región como una de las que menos crece en España. Se da la circunstancia, además, de que tiene la tasa de envejecimiento de población más acusada de Europa.

En Asturias hay poco más de un millón de empadronados, casi 3.000 habitantes menos que el pasado año. En 2010 ha aumentado el número de inmigrantes registrados, pero aún así solo suponen un 4,6% de la población (frente al 12,2% del total de inmigrantes en España), según los últimos datos del padrón municipal.

El turismo empuja a Asturias en tiempos de crisis

Una de las necesidades históricas de Asturias era un cambio de modelo productivo e ir abandonando paulatinamente la dedicación en exclusiva a los sectores primario y secundario. Poco a poco la región va avanzando por el camino del sector servicios ayudándose del turismo rural y en la próxima campaña electoral este cambio de modelo no será uno de los ejes de discusión, puesto que está funcionando.

El turismo supone hoy supone alrededor del 9% del PIB de Asturias y se espera que 2011 se convierta en una de las mejores campañas de su historia. Las revueltas en el norte de África, la recuperación económica en países europeos emisores de turistas y el aumento del turismo interior por la crisis, hacen pensar al sector en Asturias que el 2011 será un buen año para el turismo en la región.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística, en 2010 llegaron al principado más de 1.825.000 turistas, superándose así en un 1,2% la cifra del año anterior. Es así el sector que mejor está aguantando la crisis económica en Asturias y no se espera que en esta campaña electoral el modelo productivo genere excesiva controversia entre los políticos.