Las cuatro muertes de Bin Laden, según EE.UU.

• La Casa Blanca ha dado diversas versiones contradictorias
• En un primer momento se dijo que el líder de Al Qaeda estaba armado
• Casi una semana después, puntos clave de la operación no están claros

Estados Unidos ha repetido hasta la saciedad determinados datos sobre cómo acabó con la vida de Bin Laden. Entre ellos, que la operación duró menos de 40 minutos. Pero esos 40 minutos quizá sean unos de los más confusos de la historia ya que lo que no ha dejado tan claro es cómo transcurrieron. Primero el líder de Al Qaeda estaba armado, luego no. Primero murieron junto a él varios familiares, luego no…

Hasta cuatro veces ha cambiado de versión la Casa Blanca a la hora de explicar cómo los Navy Seals terminaron con el enemigo número 1 de EE.UU. Ahora, cuando se va a cumplir una semana de su asesinato, parece que la “Niebla de la guerra”, que apuntan como principal motivo de las versiones enfrentadas, nos seguirá impidiendo conocer qué pasó exactamente la madrugada del primero de mayo en la remota localidad paquistaní de Abottabad.

Versión uno: Bin Laden estaba armado

El presidente de EE.UU., Barack Obama, fue el encargado de comunicar al mundo la muerte del Bin Laden. Tras la euforia inicial que inundó al país comenzaron las dudas. La primera, una evidente: ¿Por qué le habían matado y no le capturaron? Fueron muchas las voces que se levantaron en contra de su asesinato, bien por cuestiones morales, bien por haberse perdido una vital fuente de información.

Buenas noches. Esta noche puedo informar a los americanos y al mundo que Estados Unidos ha dirigido una operación que ha matado a Osama bin Laden, el líder de Al Qaeda, y el terrorista responsable del asesinato de miles de hombres, mujeres y niños inocentes. Hace ya casi diez años que un espléndido día de septiembre fue oscurecido por el peor ataque a los americanos de nuestra historia. Las imágenes del 11 de septiembre están en nuestra memoria nacional: aviones secuestrados cortando un despejado día de septiembre; las Torres Gemelas cayendo al suelo; el humo negro saliendo del Pentágono; los restos del Vuelo 93 en Shanksville, Pennsylvania, donde la acción de heróicos ciudadanos evitó mayor desolación y destrucción. E incluso sabemos que las peores imágenes son aquellas que el mundo no vio. Una silla vacía en la mesa. Niños que fueron obligados a crecer sin su madre o su padre. Padres que nunca sentirán el abrazo de sus hijos. Cerca de 3.000 ciudadanos que nos fueron arrebatados.

La primera justificación fue la de que en el momento en el que los Navy Seals entraron en la casa de Bin Laden, se produjo un intercambio de fuego en el que el líder de Al Qaeda participó. Por lo tanto, primera versión: Bin Laden estaba armado y murió en un tiroteo.

El asesor jefe del presidente en la lucha contra el terrorismo, John Brennan, lo confirma: “La preocupación estaba en que Bin Laden se opusiera a cualquier tipo de operación de captura. De hecho lo hizo. Por eso se produjo el tiroteo”.

Solo un día más tarde, esta información se viene abajo.

Rectificación: Bin Laden no estaba armado

El martes la Casa Blanca corrige su discurso y explica que el líder de Al Qaeda estaba desarmado. El portavoz, Jay Carney, rectifica y afirma que eso sí, Osama se resistió a ser detenido. Pero no aporta más detalles que expliquen de qué manera mostró esa resistencia.

En este momento entran en juego varios medios estadounidenses que aportan más datos. El New York Times, citando a fuentes gubernamentales, especifica que el intercambio de fuego se dio solo al principio de la operación, cuando el correo del líder de Al Qaeda, Abu Ahmed al-Kuwaiti, dispara contra el equipo.

A partir de ahí, la operación de EE.UU. fue “extremadamente unilateral”.

El director de la CIA, Leon Panetta, no tarda en explicar su versión sobre estos nuevos datos. Lo hace en RBS News Hour, en donde expone su teoría: no cree que Bin Laden estuviera armado pero sí que “había movimientos en él que presentaban una clara amenaza para nuestros chicos”.

Pero, ¿qué clase de movimientos eran? Según el New York Times, esa amenaza a la que alude Panetta viene de la mano del AK-47 y la pistola Makarov que Bin Laden tenía al alcance de la mano. Al ver este material, el comando tuvo el motivo para abrir fuego.

Versión dos: Bin Laden usaba escudos humanos

En la primera versión oficial de la operación la Casa Blanca comunica la muerte de miembros de la familia del líder de Al Qaeda: una de sus esposas y su hijo.

Brennan alega que la esposa murió tras ser usada por Bin Laden como escudo humano: “Había familia en el interior de la casa. Entre ellos, una de sus mujeres que se interpuso en la línea de fuego al ser usada como escudo para proteger a Bin Laden. Creo que esto refleja hasta qué punto ha sido falso su discurso durante todo este tiempo”.

En ese momento un periodista le pregunta si la fallecida era su mujer. La respuesta es clara: “Por lo que sé sí. Era una de ellas… sirvió como escudo…cuando hubo la oportunidad de llegar hasta Bin Laden se la posicionó de tal forma que nos indicaba que se la estaba usando como eso, como escudo. Bin Laden, su hijo, o quien fuera, la puso ahí, en primera línea”.

Pero, además, junto a la esposa, según Brennan, también murió uno de los hijos del líder de Al Qaeda al que se identificó como Khalid.

Rectificación: No hubo escudos humanos

Al día siguiente el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, corrige, de nuevo, a Brennan: “En la habitación, junto a Bin Laden, había una mujer que, seguramente, es su esposa, y que resultó herida al abalanzarse contra el equipo estadounidense. Recibió un disparo en un gemelo pero no ha muerto”.

En cuanto al hijo fallecido, no se trataba de Khalid, sino de Hamza, según informa el diario The Guardian.

Versión tres: Una muerte en directo

El día que se supo la muerte del líder de Al Qaeda Brennan hizo las siguientes declaraciones: “Hemos sido capaces de ver, de controlar, en tiempo real el progreso de la operación, desde su comienzo hasta la marcha y retirada del cuerpo de la casa. No voy a entrar en detalle sobre el tipo de imágenes que vimos pero nos dieron la posibilidad de seguir la pista de forma continua”.

Acompañado de su gabinete de confianza la operación Gerónimo que acabó con la vida de Bin Laden. Fotos que dan una idea de la tensión y envergadura de la misión, una misión que parece sacada de un guión de Hollywood.

Esta versión fue secundada por unas imágenes que han dado la vuelta al mundo. En ellas se veía al presidente Obama con un claro gesto de tensión y a la secretaria de Estado, Hillary Clinton, tapándose la boca. Rostros, sin duda, de dos personas que estaban viviendo un momento histórico.

Rectificación: Una actualización tardía

El martes, Carney especifica que las actualizaciones de esta emisión eran “poco a poco” y que lo que les llegaba lo veían y escuchaban a medida que avanzaban los cambios. Pero eso sí, aseguró que hubo un periodo de tiempo, tras la entrada del comando, de unos 20 minutos, en el que realmente no sabían lo que estaba pasando.

En cuanto a la fotografía, la rectificación o desmentido, ha venido de la mano de Hillary Clinton quien ha asegurado que en ese momento “no sabía qué estaba viendo” y que si se tapaba la poca, probablemente era debido a su “alergia primaveral”.

Versión cuatro: No se informó a Pakistán

Estados Unidos insiste en que llevó a cabo su operación sin informar a Pakistán para no fracasar. De hecho, las autoridades paquistaníes lo han criticado duramente y han llegado a amenazar a EE.UU. con revisar su cooperación.

La razón, según ha declarado un funcionario de EE.UU. a la prensa: "Era esencial para la seguridad de la operación y de nuestro personal. De hecho, solo un grupo muy reducido de personas de nuestro propio gobierno sabía que se iba a dar la operación".

Rectificación: Las Dudas

Más que una rectificación, son dudas muy evidentes las que esta afirmación arroja. Son muchos los analistas los que han manifestado que les resulta difícil creer que los helicópteros de EE.UU. hayan sido capaces de entrar en territorio paquistaní evadiendo sus defensas aéreas.

De hecho, un miembro de las fuerzas de inteligencia paquistaníes ha manifestado a la BBC que Pakistán tenía constancia de que estaba en marcha un ataque contra un no identificado "objetivo de gran valor”, una vez que los helicópteros de EE.UU. ya habían entrado en el espacio aéreo paquistaní.

Ante todas estas afirmaciones y posteriores aclaraciones y desmentidos, parece que solo va a darse, de momento, una evidencia en la que no cabe rectificación: que Bin Laden está muerto.

Aunque así no lo creen los "birther", que hasta desconfían de la nacionalidad estadounidense del presidente, Obama lo ha dejado claro: "lo que importa de todo esto es el hecho de que no verán a Bin Laden caminando por esta Tierra de nuevo".