Denuncian la muerte de un opositor cubano tras una paliza de la policía
- Juan Wilfredo Soto García tenía 46 años y era conocido como "El estudiante"
- El opositor fue arrestado el pasado 5 de mayo en un parque de Santa Clara
Representantes de la disidencia interna cubana han denunciado la muerte del opositor Juan Wilfredo Soto García en un hospital de Santa Clara, dos días después de haber recibido supuestamente una paliza por parte de agentes de la policía en un parque de esa ciudad central de la isla.
Soto García, que tenía 46 años, era un expreso político que militaba en el Foro Antitotalitario Unido y era conocido en los ambientes disidentes con el apodo de "El Estudiante", por haber sido detenido por primera vez a la edad de 16 años, según referencias de opositores que le conocían.
Fuentes del hospital provincial "Arnaldo Milián Castro" de Santa Clara, situada a unos 300 kilómetros al este de La Habana, han confirmado que el disidente Soto García falleció este sábado en esa institución de salud, sin facilitar detalles sobre el caso. Según varios disidentes, el certificado médico que le mostraron a los familiares decía que Soto García murió de "una pancreatitis".
Fariñas habló con él por teléfono
El periodista disidente Guillermo Fariñas ha explicado que logró hablar con Soto García y éste le dijo que el pasado jueves, cuando estaba sentado en el céntrico parque Vidal, "fue abordado por dos policías uniformados que le solicitaron el carné de identidad y después de mostrarlo le dijeron que 'tenía que circular'".
De acuerdo con la versión del periodista independiente, Soto García respondió a los agentes que "él era un hombre libre y por eso podía permanecer allí, y entonces, los policías lo esposaron y lo golpearon y en ese momento él comenzó a gritar consignas antigubernamentales".
Según Fariñas, quien es miembro del mismo grupo del disidente fallecido, tras la paliza éste fue conducido a la "tercera unidad de la policía y desde allí al hospital".
Soto García padecía varias patologías
Fariñas indicó que Soto García padecía varias patologías como hipertensión arterial, insuficiencia cardiaca, trastornos circulatorios y era diabético, y que supo a través de médicos que le atendieron en el hospital que "tuvo una descompensación" y finalmente "sufrió un paro cardiaco".
"El certificado médico que le mostraron a los familiares decía que murió de una pancreatitis", ha añadido. "Nosotros decimos que su muerte es a causa de la 'patente de corso' que le dio Raúl Castro (presidente de Cuba) a sus partidarios y los agentes policiales, porque les ha dicho que pueden actuar impunemente" contra los opositores y "por eso lo mataron (a Soto García)", ha recalcado Fariñas.
"Queremos darle cristiana sepultura y después tomaremos las medidas para que este tipo de crímenes no queden impunes", ha señalado el opositor, Premio Sájarov-2010 por la defensa de los derechos humanos que concede el Parlamento Europeo.
En La Habana, el portavoz de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez, ha afirmado que su grupo espera que el Gobierno "realice una investigación transparente" sobre este caso "para descartar la posibilidad de un homicidio por brutalidad policial".
"Condenamos de manera enérgica esta muerte absolutamente evitable de este ex-preso político, porque no tenemos duda de que hubo una relación de causa y efecto entre la golpiza y su muerte", ha subrayado Sánchez.