Woody Allen enamora en París y en Cannes con 'Midnight in Paris'
- El neoyorquino rueda una innovadora y divertida comedia a orillas del Sena
- Esta nominada a cuatro Oscar, incluyendo película, dirección y guión
MIDNIGHT IN PARÍS
4 nominaciones a los Oscar
Película
Director: Woody Allen
Guion: Woody Allen
Dirección artística
El comienzo de la nueva película de Woody Allen, Midnight in Paris, es toda una declaración de principios de lo que va a ser la cinta: alrededor de cuatro minutos de metraje con distintos rincones de la capital francesa con los que el cineasta estadounidense deja muy claro su amor por París, que casi rivaliza con el que siente por su Nueva York natal -"si no viviera en Nueva York, París es la ciudad donde viviría", afirma el cineasta, que ya rodó a la orilla del Sena Todos dicen I love you (1996)-.
Y es que, si hay algún mortal que no esté enamorado de la ciudad del amor, tras ver la película caerá irremediablemente en los brazos de una capital francesa de postal, y en los del cineasta neoyorquino, que vuelve a demostrar en esta película su absoluta genialidad y supone una llamada de atención hacia aquellos que dudaban de que a sus 75 años mantuviera las dotes del que es uno de los más grandes cineastas vivos. Dudas que son humanas si tenemos en cuenta que, a película por año, no todas pueden ser obras maestras.
Midnight in Paris es una nueva vuelta de tuerca en la filmografía del cineasta judío, innovadora, divertida, entretenida y que nos invita a reflexionar sobre el mito de si cualquier tiempo pasado fue mejor.
La cinta enamora al espectador y ha enamorado a la crítica en el Festival de Cannes.
Un París glorioso
La nueva cinta de Woody Allen es una comedia romántica sobre una pareja de prometidos, Gil (Owen Wilson) -un exitoso guionista de Hoolywood que quiere convertirse en gran novelista- e Inez (Rachel McAdams), que viajan a París aprovechando un viaje de negocios de los padres de ella. Las experiencias que tienen en la capital francesa cambiarán sus vidas. Cuenta el amor que siente un joven por una ciudad, París, y la ilusión que tiene la gente de creer que una vida diferente a la suya sería mucho mejor.
Hasta aquí la sinopsis oficial de lo que parece otra comedia de enredos más de Allen. Pero no se puede contar mucho sin destripar algo de la historia.
[ATENCIÓN, SPOILERS]
Owen, que está enamorado de la magia de la ciudad, se ve embrujado por su hechizo hasta el punto de que viaja a las épocas de su pasado más glorioso, como cuna de los más grandes pintores y literatos del siglo XIX y XX.
En ese París de los años 20 y de la Belle Époque -al que viaja siempre a medianoche sin necesidad de grandes artilugios en forma de máquinas teletransportadoras-, este joven escritor se codea con artistas de la talla de Ernest Hemingway (Corey Stoll), Pablo Picasso (Marcial Di Fonzo Bo), Salvador Dalí (Adrien Brody), Gertrude Stein (Kathy Bates), Luis Buñuel (Adrien de Van), F.Scott Fitzgerald (Tom Hiddleston) y Zelda Ftizgerald (Alison Pill), incluso con el torero Juan Belmonte (Daniel Lundh) -por cierto, la producción española podría haber hecho algo para evitar que se hable español con acento mexicano-, entre otros muchos personajes. Owen también encontrará en este París del pasado a su musa, Adriana (Marion Cotillard).
Las escenas que el protagonista comparte con estos personajes históricos son ciertamente memorables y algunas hilarantes, como cuando Owen sugiere a Buñuel que ruede una película sobre unos invitados a una cena que no pueden abandonar la habitación, en alusión a una de las cintas más personales del genial cineasta aragonés, El ángel exterminador (1962).
[FIN DE SPOILERS]
La cinta contaba además con el morbo de ver en acción a la primera dama francesa, Carla Bruni, que hace un pequeño papel como guía del Museo Rodin. Su intervención es tan breve que es difícil valorar su calidad interpretativa, aunque no desentona con el resto del reparto, a un gran nivel de actuación.
De hecho, el cineasta ha revelado que le propuso a Bruni el papel en el transcurso de un desayuno junto al presidente francés, Nicolas Sarkozy: "'No
le ocuparé mucho tiempo, no tendrá que ensayar, sólo venga un par de días al rodaje'. Y me dijo: 'Sí, sería divertido. Me gustaría poder decirles a mis nietos que hice una película, sólo por la experiencia'", cuenta Allen sobre cómo ocurrió.
Como es habitual en Allen, la cinta cuenta con un amplio reparto encabezado por Wilson (¿Cómo sabes si...?, Ahora los padres son ellos), que se estrena con el cineasta, llevando las riendas en todo momento. También cuenta con la oscarizada francesa Cotillard (La vida en rosa) y Michael Sheen (The Queen, Saga Crepúsculo: Luna Nueva), además de Kathy Bates, Adrien Brody o Corey Stoll, entre otros.
París, "como yo lo siento"
El cineasta estadounidense, que con esta película acaba la trilogía con la española Mediapro (Vicky Cristina Barcelona, 2008, y Conocerás al hombre de tus sueños, 2010), ha confesado que Midnight in Paris "es París como yo lo siento", con una visión "muy subjetiva" de una ciudad que ha calificado de "muy excitante" y que ha comparado con su amada Nueva York.
El director también se ha confesado "afortunado" por haber podido rodar en la capital francesa bajo la lluvia, ya que profesa una gran amor por "las ciudades bajo la lluvia", lo que también queda constatado en la cinta.
"No me gustaría volver a ningún otro tiempo diferente del actual", ha confesado Allen en clara alusión al argumento de la cinta, que sí que ofrece al espectador esa posibilidad de soñar con la magia y el encanto del París del pasado y del París actual en un apasionante viaje cinematográfico.