Levantan la imputación de dos Tedax del 11-M acusados de encubrimiento y falso testimonio
- La juez no aprecia indicios "suficientes" de estos delitos
La titular del Juzgado Central de Instrucción número 43 de Madrid, Coro Cillán, ha acordado este martes levantar la imputación a dos agentes de los Tedax que trabajaron en los atentados del 11 de marzo de 2004 por encubrimiento y falso testimonio, al no apreciar indicios "suficientes" de estos delitos.
Ambos habían sido citados a declarar en relación con la querella que investiga la comisión de posibles irregularidades cometidas durante la recogida y el traslado de restos de explosivos utilizados en el 11-M.
En una providencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, la magistrada ha acordado suspender por "no existir indicios suficientes, y sin causar efecto alguno", las declaraciones señaladas para las 13.30 horas de este martes de los dos Tedax de la Unidad Central, "visto el resultado de las actuaciones".
Imputados la semana pasada
La magistrada imputó la pasada semana a un inspector jefe y a otro agente pertenecientes a la Unidad Central de Desactivación de Explosivos y NRBQ al considerar que las declaraciones que efectuaron ante su juzgado el pasado 13 de abril no se ajustaban a la realidad, según informaron fuentes jurídicas.
Ese día, los dos Tedax afirmaron que no tenían conocimiento de que se produjera "irregularidad alguna" en el traslado de los vestigios y mostraron su "convencimiento" de que el entonces comisario jefe Juan Jesús Sánchez Manzano no ordenó deshacerse de muestras.
Según testificaron, no es "anómalo" ni "delictivo" que los vestigios se remitan a la Unidad Central. Uno de los policías explicó que el día del atentado permaneció en la Unidad Central recabando información sobre los focos de explosión y los hechos ocurridos con el fin de detectar el total de carga explosiva y los puntos exactos donde estallaron los artefactos, negando así la versión de los agentes de la Brigada Provincial de Madrid que dijeron que estaba en Atocha.
Por su parte, el otro agente declaró que aquel día estuvo, entre las 7.55 y las 10.30 horas, en la estación de El Pozo y que no se hizo cargo de ninguna muestra ni recibió órdenes de Sánchez Manzano a este respecto.
Querella de las víctimas
Esta diligencia se practicó en la investigación de la querella interpuesta por la Asociación de Ayuda a las Víctimas del 11-M contra el Sánchez Manzano por los delitos de encubrimiento, falso testimonio y omisión del deber de perseguir delitos. En la causa también están personadas la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), el Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión de Oficiales de la Guardia Civil.
Sánchez Manzano fue el máximo responsable de los agentes encargados de la desactivación de las bombas de los atentados de Madrid y el que se hizo cargo de las muestras de los explosivos. Según la querella, su actuación dificultó conocer la naturaleza de las bombas y, por lo tanto, la autoría exacta de los terroristas.