Antonio Vega, mil voces para el recuerdo

• El documental Tu voz entre otras mil se acerca a las personas que le rodearon
• La película, que aún se está rodando, muestra imágenes inéditas de su vida
• Se cumplen dos años de su fallecimiento. Ver Especial Muerte Antonio Vega

Primeras imágenes de 'Tu voz entre otras mil'

Cuando el artista se convierte en leyenda se desdibujan los trazos de la persona y afloran con brillo los del personaje. Dos años después de su muerte,  del recuerdo colectivo de Antonio Vega penden adjetivos y definiciones que ahondan en su lirismo de "poeta eléctrico" y en la belleza críptica de sus canciones, quizás también en ese lado autodestructivo que siempre estuvo ahí.

Detrás del hijo, amigo, hermano o compañero- reiteran sin descanso los que le conocen-había una persona decidida a "no decepcionar a tantos y tantos dispuestos a dar la vida por él”.

Fragilidad de acero

A aquel grupo de gentes excepcionales y geniales, que iban y venían, si acaso se transformaban, en torno a su figura magnética, se refiere Tu voz entre otras mil, el documental producido por Rodando Voy que dirige la periodista Paloma Concejero.

“La película muestra imágenes inéditas de grabaciones caseras“

La filmación atrapa la personalidad más cercana, cotidiana y por eso sin remedio desconocida del compositor, a través de los ojos de su familia, de los miembros de su banda, y de otros compañeros de profesión, (el documental cuenta con el desaparecido Enrique Morente). El mundo de magia opaca del compositor de El sitio de mi recreo se aclara, para pintar el retrato de un chico “ni tan triste, ni tan solitario”.

La película se nutre de material inédito procedente de las películas caseras de Súper8 del padre de Antonio, de grabaciones y dibujos de seguidores, de imágenes de archivo que nunca habían visto la luz, y se completa con las entrevistas que el periodista Bosco Ussía le realizó a través del tiempo.

Una melancolía rota por el humor

En aquellas grabaciones íntimas e imperfectas de video doméstico se descubre a una familia Vega feliz, sencilla y que amaba la naturaleza. Los veranos en Fuengirola se perfilan inolvidables y dejan la huella de la mar como una constante impresa en sus futuras canciones.

“Viendo las imágenes te das cuenta de que son la banda sonora de su vida y entiendes absolutamente todo”- explica la directora Paloma Concejero que se atreve a desmontar tópicos sobre la eterna soledad del cantante- “No era tan melancólico. Tenía un sentido del humor muy fino. No era tan solitario, él decía que buscaba encontrarse a si mismo entre la gente”, aclara convencida.

“Atendía a sus seguidores personalmente“

Su compromiso se extendía más allá. Son muchas las anécdotas que destacan su “dedicación a los fans”. El autor de La chica de ayer,  frágil y cansado, atendía a todo el mundo. Detallista. Creaba, como poeta que era, dedicatorias personalizadas que se convierten en tesoros inolvidables.

Aquellas gentes que le rodeaban

Tu voz entre otras mil se encuentra en fase de rodaje a punto de culminar sus últimas entrevistas, en un proyecto que crece con las redes sociales como aliadas.

El documental cuenta con su propio diario de grabación, dónde todos aquellos que le siguieron rescatan historias y “cuelgan” tiernos recuerdos. Un carisma que se dejó sentir en la capilla ardiente hace dos años. “Yo no le conocí pero era un ser extraordinario”, afirmaba una seguidora.

“Poseía un agudo sentido del humor“

El viaje no ha sido fácil. Por primera vez, se abren ante la cámara sus familiares más íntimos que perfilan su retrato. “Su madre, Mari Luz, es una mujer carismática que recitaba de memoria sus canciones. Eso me emocionó muchísimo y me hizo darme cuenta de que Antonio no era tan críptico como se le describía”, confiesa en una entrevista a RTVE.es, la directora.

Antonio Vega vivió con intensidad. Era un curioso sin límite, “apasionado de los misterios de la ciencia y aficionado a la astronomía”, explica Concejero. Paradójicamente, aquel astrónomo aficionado siempre buscó sin descanso su lugar en el universo.