Strauss-Kahn, a una azafata justo antes de ser detenido: "¡Bonito culo!"
- El comentario lo hizo sentado en la butaca del avión
- Es la versión del diario francés Le Point
Se ha comentado estos días que tenía cara de haber dormido poco. Sin embargo, parece que aún le quedaba “humor” al presidente del FMI horas después de intentar, presuntamente, agredir sexualmente a la camarera del hotel en que se hospedó.
Tanto es así que, una vez dentro del avión en el que fue detenido, y constatando las bondades físicas de una de las azafatas, le soltó un “¡Bonito culo!” en voz alta que –se supone que sin querer– se ha convertido en la última frase del ya expresidente del FMI antes de ingresar en prisión.
Es lo que cuenta, al menos, el diario francés Le Point, que detalla cómo Strauss-Kahn le dedicó a la azafata tal piropo en voz alta y entre la estupefacción del resto de la tripulación.
Estupefacción que tardó en desaparecer ya que, de pronto, dos policías entraron al avión y lo invitaron a abandonar su asiento en clase Business, haciéndole creer que tenían que decirle algo “confidencial”.
Strauss-Kahn había avisado a la tripulación de que necesitaba recuperar su teléfono móvil, olvidado en la habitación del hotel en que se alojaba en Nueva York. Pero el comandante le había advertido de que, si el teléfono no llegaba enseguida, no iba a poder retener más tiempo el avión.
Esa fue la razón por la que a los pasajeros –narra Le Point–no les extrañó demasiado la llegada de los policías.
Lo que sí pudo haberles dado pistas es que, minutos antes de que los policías irrumpiesen en esa escena de tan mal gusto, los móviles se quedaron sin cobertura. Según Le Point, fue una maniobra de la policía para evitar que a DSK –como se le llama en Francia– se le avisara de que no llegaría, al menos de momento, a París.