Los minimonitores, llamativos complementos para la pantalla del ordenador

• Se colocan junto al monitor para ampliar el espacio de trabajo
• Están disponibles en tamaños entre 7 y 10 pulgadas

Los minimonitores se enchufan al ordenador como complemento de la pantalla principal

Los minimonitores llevan tiempo intentando hacerse un hueco en las tiendas de gadgets. A medida que su electrónica se ha ido abaratando, las pantallas de buena resolución y bajo consumo también se han vuelto ubicuas.

El resultado es que muchas de ellas se usan en los reproductores portátiles de DVD, los tablets, marcos de fotos y aparatos GPS a un coste realmente económico.

El siguiente paso para los fabricantes de gadgets era casi obvio: incluir un adaptador para que se pudieran comportar como monitores complementarios a la pantalla principal del ordenador de casa o de la oficina.

Un minimonitor no es nada más que una pantalla de reducido tamaño, de entre 7 y 10 pulgadas que se enchufa al ordenador como complemento a otra pantalla normal.

“Su precio oscila entre los 75 y los 200 euros, dependiendo de los tamaños y características“

Su precio oscila entre los 75 y los 200 euros, dependiendo de los tamaños y características, y aunque es más fácil conseguirlos fuera de España, aquí ya los tienen algunas tiendas.

Entre las marcas especializadas destacan Lilliput y Mimo, aunque el resto de fabricantes como Samsung también les irán a la zaga, en ocasiones con pantallas convencionales que ya incluyen minimonitores laterales.

Una 'extensión' de la pantalla principal

Al utilizar el ordenador con un minimonitor el escritorio simplemente se extiende para dar cabida a un poco más superficie virtual en la que colocar ventanas o programas.

El ratón y las ventanas pueden moverse libremente y es fácil guardar allí algunos iconos fuera de la vorágine del escritorio principal.

La gente los usa para diversas tareas: abrir en ellos programas tales como el correo o el chat, para colocar de forma permanente las paletas de herramientas de algunas aplicaciones, los widgets, para videoconferencia, etcétera.

“Trabajar con más superficie en el escritorio del sistema mejora la productividad“

Aunque no hay un consenso absoluto, en general se considera que trabajar con más superficie en el escritorio del sistema mejora la productividad, razón por la que mucha gente usa dos o más monitores a la vez.

Pero también hay quien opina que para ciertas personas más pantallas con más contenidos pueden suponer una distracción innecesaria: así que todo depende del tipo de tareas que se vayan a realizar y las costumbres personales de cada uno.

Características de los minimonitores

A continuación se indican algunas de sus características de los minimonitores; según los modelos y la forma en que las incluyen su precio puede variar significativamente:

Conexión USB. La mayor parte de los minimonitores no necesitan alimentación de corriente ni tampoco cable de vídeo o de señal. Se conectan a cualquier USB 2.0 que esté libre en el equipo. Por un lado esto es una ventaja; por otro –si se va a usar mucho– puede que consuman demasiado, ralenticen el ordenador o no funcionen con algunos puertos USB como los del teclado. Si se conectan sin alimentación a un portátil… problema: probablemente agoten la batería del equipo al poco tiempo.    

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Soportes y enganches. Conviene comprobar la forma en que el minimonitor puede colocarse sobre la mesa o engancharse al equipo; normalmente conviene que esté situado a la misma altura que la pantalla, pero depende del uso que se le vaya a dar. Algunos incluyen tornillos, enganches de plástico o ventosas.    

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Tamaño y resolución. Los tamaños varían entre 7 y 10 pulgadas (18 y 25 cm. de diagonal), pero es más importante la resolución que pueden mostrar: normalmente varía entre 640 x 400 y 1000 x 600 píxeles con 800 x 480 como una resolución razonable para un modelo de 7 pulgadas. Algunos tienen formato panorámico; otros mantienen el aspecto 4:3 tradicional.    

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Funciones táctiles. Algunos minimonitores son a la vez pantallas táctiles: pueden utilizarse como dispositivos de entrada, por ejemplo para seleccionar iconos u opciones de un menú.    

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Modo vertical / apaisado. Los minimonitores suelen poderse girar para adaptar la imagen a la posición en que se coloquen en la mesa junto a la pantalla, bien por software o con un botón especial. Así se puede elegir la posición que resulte más cómoda o productiva.    

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• Webcam. Al igual que casi todos los ordenadores de hoy en día, algunos minimonitores también incorporan una pequeña cámara web de baja resolución pero suficiente para hacer una videollamada o videoconferencia por Internet.