Michel Martelly, presidente de Haití: ' Yo no soy un corrupto y nadie a mi alrededor debe serlo'

• "Una de nuestras prioridades es la educación", asegura el nuevo mandatario
• Solo lleva 12 días en el poder y su gestión aún no se nota
• Agradece la cooperación de España

Michel Martelly nos recibe, tras dos convocatorias en días sucesivos finalmente canceladas, en una sala del hotel Caribe de Puerto Príncipe, donde tuvo su cuartel general para las relaciones con los medios de comunicación antes de su elección como presidente. Nos saluda efusivamente, recordando la entrevista que le hicimos hace dos meses, en la víspera de las elecciones, cuando Martelly ya estaba convencido de su victoria. Al igual que entonces se muestra amable, efusivo y con una autconfianza visible. Eso sí, nos advierte que el tiempo de que disponemos es muy limitado porque nos recibe antes de ofrecer una rueda de prensa y todo el mundo está esperando.

-PREGUNTA: Presidente Marelly, usted lleva apenas 12 días en la Presidencia. ¿cómo definiría la situación en Haití?.

-RESPUESTA: La situación, para la gente en las calles, prácticamente es la misma. Son solo 12 días los que llevo en la presidencia y hasta que mi primer ministro no sea ratificado por el parlamento no tendré el poder en mis manos.

-P: ¿Y cómo piensa ejercer ese poder?

-R: Ciertamente he demostrado ya que se trata de un liderazgo diferente. He estado en las calles, asegurándome de que quienes realizan las obras públicas tengan los medios necesarios. Por ejemplo a la hora de mejorar los drenajes ahora que ha llegado la época de lluvias. Estas cosas son la que tenemos que arreglar…

-P: Pero la tarea que tiene frente a sí es inmensa. ¿Cuáles son sus prioridades?

-R: Realmente es una tarea inmensa. Pero el problema estaba antes del terremoto. El terremoto ha puesto ante nuestros ojos lo que estaba oculto: la pobreza, las chabolas por todas partes, etc. Son varias las prioridades. Una de ellas es la educación. Vamos a crear un Fondo Nacional para la Educación con aportaciones de empresas. Quiero que haya educación gratuita para todos los niños haitianos. Creo que para sacar a Haití de la miseria debemos hacerlo a través de la Educación. También quiero llevar agua potable a todo Puerto Príncipe…

P.-: Pero de momento no hay nada de reconstrucción en Puerto Príncipe, todo está casi igual que al día siguiente del terremoto…

R.- Hay que solucionar el problema de la superpoblación de Puerto Príncipe. Quiero crear nuevas comunidades a la hora de la reconstrucción. Comunidades con escuelas, iglesias, mercados y clínicas. Necesitamos enormes terrenos vacíos fuera de Puerto Príncipe para construir esas comunidades y permitir a la gente abandonar las zonas superpobladas. Tenemos que trabajar por desarrollar zonas fuera de la ciudad porque inyectando más dinero atraeremos más gente a Puerto Príncipe, que fue construida para doscientas mil personas y ahora tiene entre tres y cuatro millones de habitantes. Así que creo que lo mejor que podemos hacer ahora es lo contrario: construir fuera de Puerto Príncipe para alentar a las personas que vinieron buscando trabajo a moverse a esas nuevas comunidades.

'Yo no soy un corrupto'

P.- Uno de los problemas tradicionales de Haití ha sido la corrupción. Con tanto dinero ahora afluyendo para ayudar a la reconstrucción, ¿cómo va a evitar que suba la corrupción?

R.- En primer lugar, dando ejemplo. Yo no soy un corrupto así que nadie a mi alrededor debería ser corrupto. En segundo lugar, orientando el sistema judicial y legal  para que actúe cuando sea necesario y si alguien es sospechoso de corrupción la ley y la justicia tendrán que hacer su labor. Tenemos que establecer un sistema para que la gente pueda denunciar, anónimamente si hay sospechas de corrupción. Y también publicando los proyectos, por ejemplo, en una página web en la que se puede comprobar cómo se gasta el dinero, si hay un proyecto de construcción de un puente confirmar que ese puente se ha construido… Así las cosas serán visibles y la gente podrá confirmar que se han realizado.

P.- ¿Qué espera de la Comunidad Internacional en el futuro?

R.- Me he comprometido conmigo mismo a incrementar la confianza de la Comunidad Internacional con nosotros, con Haití. Porque a través de la confianza lograremos el apoyo que estamos buscando. Incluso conseguiremos más de lo que esperamos. Eso es lo que planeo hacer, mejorar las relaciones con nuestros socios.

P- ¿Y cómo espera que se traduzca esa confianza?

R- Queremos invitar a nuestros socios en la Comunidad Internacional a que vengan y no solo nos envíen dinero, sino traer soporte técnico, que sean parte de la reconstrucción. Algunas veces es mejor, en vez de pedir dinero, pedir las infraestructuras como tal. A España, por ejemplo, que no simplemente nos traigan el dinero, tráigannos el hospital. De esta manera ni siquiera tendremos que hablar de corrupción. Porque si usted viene y hace el trabajo, crea esa confianza. Así que lo que pedimos de la Comunidad Internacional es permitir probarles que nuestras intenciones son buenas y esto permitirá a los haitianos y al resto del mundo que logremos avanzar con ellos.

Agradecimiento a España

P- ¿Y qué opina de la actitud de España hacia Haití?

R- España nos ha apoyado muy especialmente, ha habido un compromiso y una gran ayuda después del terremoto. Y también en el momento de las elecciones, cuando los haitianos pelearon por la democracia ante los intentos de fraude. Nuestra relación es estupenda. Le doy las gracias a España por todo lo que ha hecho por Haití y seguro que va a ser una relación de buenos hermanos.

Nos avisan que el tiempo se ha agotado y el presidente nos ha dicho sus últimas palabras ya de pie mientras se despide, a la carrera.  Se quedan muchas preguntas pendientes, muchas incógnitas por despejar, que el tiempo irá desvelando.