La supuesta orgía con niños de un exministro, último escándalo político-sexual en Francia

• Otro exministro denuncia en televisión que el caso se ocultó por el Gobierno
• No ha dado el nombre del presunto autor ni de los que lo supieron
• La clase política gala carga contra él y le exige que vaya a la Justicia
• La conducta sexual de sus políticos avergüenza a los franceses

Primero fue la detención del director del FMI y potencial candidato socialista, Dominique Strauss-Kahn. Luego la denuncia contra un secretario de estado por acoso sexual que provocó su dimisión. Y ahora la denuncia en un programa de televisión en horario de máxima audiencia de abuso de menores de un exministro en Marruecos.

Los escándalos sexuales vinculados a políticos (hombres) en Francia han abierto un auténtico debate público sobre los límites de la información sobre la vida privada de los cargos públicos.

Denuncia en televisión

El último en aportar su 'granito' de arena al debate es el exministro de Educación Luc Ferry que en el programa Grand Journal de Canal + ha denunciado que otro exministro fue sorprendido en Marraquech realizando una orgía con niños y que el asunto fue ocultado por las autoridades.

El exministro ha declarado que este asunto era conocido por "las autoridades del Estado al más alto nivel", incluyendo un primer ministro, pero ha rechazado dar su nombre porque podría ser persegudo por la Justicia.

Ferry, filósofo de prfoesión, ocupó la cartera de Educación entre 2002 y 2004, ha recordado este asunto para explicar por qué los periodistas franceses no pueden decir nada de la vida privada de los políticos.

Los medios franceses han sido acusados de tapar estos asuntos tras conocerse el caso de Strauss-Kahn, cuya actitud hacia las mujeres era vox populi sin que se publicase nada al respecto.

Las palabras de Ferry han provocado un rechazo a izquierda y derecha en la clase política francesa.

Críticas unánimes

"Es la no-denuncia de un delito", ha asegurado la exministra de Justicia y exmagistrada, Rachida Dati. "

Si conoce estas cosas debería denunciar los hechos e indicar de quién se trata", ha afirmado un eurodiputado francés, estimando que en ese momento la Justicia debería tomar cartas en el asunto.

"Tenemos una legislación en Francia que permite perseguir a toda persona que cometa actos de pedofilia en el extranjero", ha recordado Dati.

La misma indignación ha provocado en el ministro de Asuntos Exteriores, Alain Juppé: "Si el señor Luc Ferry tiene pruebas de que hubo una conducta criminal o penal (...) debe ir a los tribunales".

"Si tenemos la convicción de que hay un delito o un crimen, hay que denunciar ante la Justicia y no ir simplemente a hablar ante la prensa", ha insistido Juppé.

Mientras, el portavoz del Gobierno, François Baroin, ha juzgado "verdaderamente sorprendente" lo dicho por Ferry.

Debate nacional

Ante las críticas, Ferry ha tratado de justificarse: "Yo he tratado de defender a la prensa que ha respetado la vida privada y que no puede hacerse culpable de difamación. No tengo ninguna prueba ni ningún hecho preciso sobre este asunto pero en la época en la que era ministro he escuchado hablar sobre el asunto", ha declarado al diario L'Express.

Tras el escándalo de Strauss-Kahn, el secretario de Estado Georges Tron fue acusado de agresión sexual por dos exempleadas del ayuntamiento del que era alcalde, forzando su dimisión, lo que ha abierto la puerta de los medios a testigos de los polémicos hábitos sexuales de los políticos franceses y ha puesto de relieve el machismo reinante en este ámbito.

De hecho, varias políticas han explicado recientemente haber sido víctimas de palabras sexistas o insinuaciones de sus colegas.

Según numerosos analistas, estos escándalos podrían marcar un antes y un después en los hábitos de un país conocido por su liberalismo sexual y su protección de la vida privada.