El transbordador Endeavour finaliza con éxito su última misión espacial
- Ha aterrizado sin percances en el Centro Espacial Kennedy, Florida
- Solo queda una misión más antes de que acabe la era de los transbordadores
El transbordador Endeavour ha aterrizado este miércoles sin percances en el Centro Espacial Kennedy, en Florida, al término de su última misión a la Estación Espacial Internacional (ISS) antes de ser retirado de circulación.
En esta última misión, la tripulación estuvo formada por el comandante Mark Kelly, el piloto Gregory Johnson, y los especialistas de misión Michael Fincke, Greg Chamitoff, Andrew Feustel, y el astronauta Roberto Vittori, de la Agencia Espacial Europea.
La principal tarea de esta misión ha sido la instalación del Espectrómetro Magnético Alfa (AMS por sus siglas en inglés).
Es un instrumento diseñado para ser instalado en la ISS y pensado para detectar varias clases de materia exótica mediante la medición de rayos cósmicos, y que podría ayudar a los científicos a estudiar la formación del universo y a detectar materia oscura y antimateria.
Tras la llegada del Endeavour solo queda una misión más antes de que acabe la era de los transbordadores y sean retirados definitivamente.
Los transbordadores se retirarán para ahorrar los 4.000 millones de dólares precisos para que la NASA pueda desarrollar nuevos vehículos que puedan viajar más allá de la órbita de 335 kilómetros de altitud de la estación.
Amplia experiencia
Esta misión pone el fin de la carrera activa del Endeavour y 30 años de misiones espaciales. Fue construido para cubrir el hueco dejado por el Challenger tras su pérdida en enero de 1986.
Lleva en activo desde el 7 de mayo de 1992 con la misión STS-49 que consistió en capturarel satélite de comunicaciones INTELSAT VI para trasladarlo a una órbita geosincrónica, es decir, con el mismo periodo orbital que la Tierra.
Será retirado al Centro de Ciencia de California en Los Ángeles tras 299 días de operaciones,12 visitas a la ISS, el transporte de 173 astronautas y 25 misiones.
De estas sin duda cabe destacar la STS-61, la primera misión de mantenimiento al telescopio espacial Hubble, una compleja mision con nada menos que cinco paseos espaciales.
La última misión de un transbordador espacial estadounidense está programada para el 8 de julio cuando el Atlantis lleve su cargamento de equipos y suministros a la ISS.
La estación, que tiene una tripulación permanente a 385 kilómetros de la Tierra, es un programa internacional de 100.000 millones de dólares en el que participan 16 naciones.