El referéndum sobre la energía nuclear en Italia, ¿un nuevo castigo para Berlusconi?
- La derrota electoral de las municipales ha hecho que aumente el interés
- Falta que el Consititucional ratifique incluir la custión nuclear en la consulta
La derrota electoral en las municipales ha dado al referéndum del próximo domingo y lunes una dimensión inusitada. Estaba pasando desapercibido. Parecía condenado al silencio de la indiferencia pero el vuelco electoral de hace dos semanas ha revitalizado la importancia de las cuestiones planteadas, más como otro castigo al gobierno que por las preguntas en sí.
El Tribunal Constitucional debe pronunciarse sobre si es o no procedente incluir la cuestión nuclear dado que el gobierno la ha apartado temporalmente de sus planes. Hace una semana el Tribunal Supremo dijo que sí. Ahora el constitucional debe ratificar esa sentencia o modificarla.
El futuro nuclear
Son 4 preguntas las que se plantean: dos sobre el agua, una sobre el Legitimo Impedimento y la nuclear. El ejecutivo alega que el tema nuclear ha quedado apartado de su planes tras el desastre de Japón. Pero la oposición y los comités antinucleares saben que si ahora no lo rechaza el pueblo, la energía nuclear podría volver dentro de un par de años como, incluso, ha rumoreado Berlusconi.
La energía atómica está dando brío a los días previos a una consulta popular que parecía condenada al ostracismo. Hace 16 años que ningún referéndum consigue el quórum en Italia. La temperatura asciende e incluso el Presidente de la República, Giorgo Napolitano, confiesa hoy que va a ir a votar.
Hace falta que acudan 25.300.000 italianos para que tenga validez la consulta, lo que en sí supondría una nueva capitulación del gobierno de Berlusconi.