España rompe con el régimen sirio al asegurar que ha perdido su legitimidad por la represión
- La ministra de Exteriores equipara a Asad con Gadafi por atacar a su pueblo
- España había mantenido hasta ahora buenas relaciones diplomáticas con Asad
- Propone al Grupo de Contacto que firme un pacto político con los rebeldes libios
La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha asegurado que el presidente de Siria, Bachar al Asad, con el que España ha mantenido una estrecha amistad desde su llegada al poder, ha "perdido la legitimidad" de seguir gobernando el país al haber empleado la fuerza militar contra manifestantes pacíficos.
Jiménez ha declarado que Al Asad ha incurrido en el mismo comportamiento de Muamar al Gadafi después de haber provocado centenares de víctimas, por lo no merece seguir al frente del poder.
El presidente de Siria "ha perdido su legitimidad, porque ha empleado la fuerza militar contra su propio pueblo", ha subrayado Jiménez.
A su juicio, al Asad solo podría recuperar la legitimidad "si es capaz de iniciar un proceso de reconciliación nacional, de diálogo y de reformas".
Apoyo a la resolución de la ONU
Estas palabras de Jiménez van en la línea de las pronunciadas por los jefes de la diplomacia de Estados Unidos y las principales potencias europeas, que han defendido que Asad debe implantar las reformas que le pide su pueblo o marcharse.
De hecho, Francia y Reino Unido esperan que se apruebe una resolución en la ONU de condena al régimen sirio por atacar a su propia población.
En este sentido, la ministra ha informado de que España estaría de acuerdo en que se aprobase en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas la resolución promovida por varios países europeos para condenar la actuación del régimen de Damasco.
El objetivo de esa propuesta, que se votará en los próximos días, es aumentar la presión sobre Al Asad para que ponga fin a la violenta represión.
Según Jiménez, España apoya todo aquello que permita "avanzar desde la comunidad internacional y Naciones Unidas".
"Estamos enormemente preocupados y estamos tratando de actuar desde la UE y la ONU. El mensaje es claro y firme para todos los gobernantes: no se puede utilizar la fuerza militar, la violencia", ha añadido.
Cambio de postura
Curiosamente la ministra de Exteriores fue criticada cuando se desataron las protestas en Siria por no haber mostrado suficiente contundencia en la defensa de las reformas democráticas en una gira por Oriente Medio realizada solo unas semanas antes de que estallasen las manifestaciones, las más importantes en los once años que Asad lleva dirigiendo el país.
Entonces, Jiménez se defendió asegurando que el líder sirio le prometió emprender unas reformas que luego no llevó a cabo.
Este endurecimiento de la postura española respecto a Siria coincide con un movimiento similar en el caso de Libia, ya que Jiménez reconoció el pasado miércoles por primera vez a los rebeldes libios como únicos interlocutores legítimos durante una visita a Bengasi.
La ministra española se encuentra ahora en Abu Dabi, donde participa en la tercera reunión del Grupo de Contacto sobre Libia.
Propuesta al Grupo de Contacto
Allí ha anunciado que va a proponer en la reunión del Grupo de Contacto sobre Libia que se celebra este jueves en Abu Dhabi que esta entidad firme un "pacto" de carácter político con el Consejo Nacional de Transición para "acompañar" a los rebeldes en la consolidación de la democracia en el país una vez el líder libio, Muamar Gadafi, abandone el poder.
Según ha explicado la ministra, este pacto se vertebraría en tres áreas de trabajo -económica, política y de seguridad- a las que cada país del Grupo de Contacto contribuiría en función de su experiencia y capacidades.
La idea, ha agregado Jiménez, es ayudar al Consejo Nacional de Transición a poner en práctica la 'hoja de ruta' que se han marcado para construir un "estado democrático" en Libia que cuente con los fondos necesarios y con unas fuerzas de seguridad preparadas y capacitadas.
Respecto a la financiación que necesita el Consejo Nacional de Transición para poder seguir garantizando los servicios y necesidades básicas de los ciudadanos, Jiménez ha confiado en que de la cita de este jueves salga el "marco legal" que permita que se pueda hacer llegar fondos a los rebeldes a través del mecanismo financiero que se acordó en la anterior reunión de Roma.