Claves: la 'crisis de la bacteria E.coli' y la intoxicación alimentaria en Alemania
La crisis sanitaria de la bacteria E. coli comenzó en Alemania tras detectarse un aumento muy significativo de enfermos con diarrea sanguinolienta. Después de apuntar en varias direcciones, Berlín ha confirmado que el origen está en los brotes germinados de soja encontrados en una granja de Baja Sajonia.
El brote, atribuido a la variante 0104H4, más agresiva de la bacteria, ha causado ya 31 muertes y más de 3.000 afectados, según los datos del Centro Europeo de Control de Enfermedades. Todos los fallecimientos se han producido en Alemania, excepto el de una mujer en Suecia.
Entre los países en los que se han encontrado casos están también Austria, Dinamarca, Holanda, Reino Unido y España. Son casos aislados relacionados con viajes recientes a Alemania.
En un primer momento, las autoridades de Hamburgo apuntaron a una contaminación en pepinos españoles, que posteriormente quedó descartada, aunque el daño a los productores ya estaba hecho.
La Comisión Europea ha propuesto un fondo de 210 millones de euros destinado a compensar a los agricultores afectados de los países de la UE.
¿Cómo comenzó la crisis?
Al realizar análisis en busca del origen del brote, se realizaron pruebas, entre otras verduras, con cuatro pepinos escogidos aleatoriamente del mercado central de Hamburgo. Tres de los pepinos contaminados resultaron ser españoles -uno de ellos de cultivo biológico- y el otro de Holanda, según apuntaron medios alemanes.
Análisis posteriores han demostrado que la bacteria encontrada en los pepinos españoles analizados es diferente a la encontrada en las heces de los afectados, por lo que Hamburgo descartó que el origen fuera España.
Los estudios se centraron luego en la soja, y tras varios análisis que dieron negativo, primero en una granja y luego en muestras de este producto que una familia afectada guardaba en su frigorífico, se ha encontrado la variedad agresiva en una produción de la Baja Sajonia.
¿Qué bacteria produce la infección?
La Escherichia coli o E-coli es una bacteria que se encuentra generalmente en los intestinos de los animales y las personas. Habitualmente es una bacteria inocua, pero ahora nos encontramos ante la variedad 0104H4, que produce una potente toxina (toxinas de Shiga o verotoxinas) que daña los glóbulos rojos y los riñones, tal y como explica en RNE el profesor Antonio Guerrerro Espejo, consultor de Enfermedades Infecciosas y especialista en Microbiología.
La bacteria se encuentra en los intestinos de animales rumiantes: vacas, ovejas y cabras.
¿Qué efectos tiene en la salud?
Esta agresiva cepa de la E-coli provoca diarreas sangrantes, una enfermedad conocida como síndrome urémico hemolítico (SUH).
El SUH afecta a la sangre, los riñones y, en los casos más graves, al sistema nervioso central. Se trata de una enfermedad grave que requiere hospitalización.
Los síntomas de la infección por E.coli Enterohemorrágica incluyen fuerte dolor abdominal, diarrea intensa y a menudo con sangre y a veces náuseas, vómitos y fiebre leve. Esta sintomatología suele aparecer tres o cuatro días después del contagio, aunque también pueden hacerlo entre 1 y 10 días después.
¿Por qué esta variante es tan agresiva?
Los científicos alemanes que han investigado la variante agresiva de esta bacteria E. coli han descubierto que, además de generar el veneno shigatoxina, genera autoanticuerpos que atacan al cerebro y los riñones del propio paciente.
¿Qué medidas que se han adoptado?
Las primeras medidas que se adoptaron nada más empezar la crisis se centraron en la inmovilización de los alimentos que entonces se creía que eran los culpables. La exportación de frutas y verduras de España quedó completamente parada con pérdidas que los productores estimaron en 200 millones a la semana.
La Junta de Andalucía paralizó como medida cautelar los lotos de pepinos de los productores de Almería y Málaga. Los agricultores alemanes distruyeron verduras por dos millones de euros diarios ante la imposibilidad de dar salida en el mercado a las partidas por el miedo desatado entre los consumidores, según las asociaciones del sector.
Alemania ha mantenido la recomendación de no comer pepinos, tomates y ensaladas en las primeras semanas que luego ha levantado. De momento, la mantiene sobre los brotes de soja, alfalfa y otros vegetales.
Se ha recomendado que no se consuman en concreto 18 clases de semillas germinadas bajo sospecha, entre las que figuran brotes de brócoli, de guisante, de garbanzo, de judía, de ajo, de lenteja y de rábano.
¿Cómo ha podido llegar esa bacteria a los vegetales?
Los expertos explican que la mayor parte de las veces la fuente de contaminación está en el origen, pero ha tenido que existir una contaminación cuya fuente original sea las vacas o el rumiante que tuviera esa variedad de la bacteria.
Por eso el contagio puede proceder de los restos fecales de animales bovinos y ovinos en la comida que llegan al hombre por vía oral, por manos infectadas, por el procesado de comida y agua contaminada o por contacto directo entre personas ya enfermas.
¿Se ha dado algún caso dentro de España?
Según el Centro Europeo de Control de Enfermedades en España se han registrado por el momento dos casos. El primero es el de un hombre de 43 años que ingresó en estado grave en un hospital de San Sebastián, tras volver de un viaje a Alemania.
El segundo caso ha sido el de una turista alemana, de 36 años y residente en una zona cercana a Hamburgo, que estaba de vacaciones en Tenerife. El laboratorio del Centro Nacional de Microbiología confirmó que tuvo E. coli 0104, la variante más agresiva.
Aparte, la atleta vallisoletana Elena Espeso, que viajó a Alemania para correr el maratón de Hamburgo, también tuvo que ser ingresada en un hospital por la misma infección.
¿A quién afecta?
El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), un organismo independiente de la Unión Europea, considera que el actual brote "es uno de los mayores descritos de SUH en todo el mundo, y el más importante jamás detectado en Alemania". Según este organismo, afecta principalmente a los adultos y especialmente a las mujeres.
Medidas de prevención
- Vigilar posibles síntomas, como las diarreas hemorrágicas, y consultar al médico
- Todas las frutas deben lavarse bien, al igual que las manos
- La bacteria se puede eliminar sumergiendo las verduras durante 10 minutos en agua con unas gotas de lejía apta para el consumo humano o en un preparado para el lavado de hortalizas. También cociendo las verduras al menos 10 minutos o congelándolas antes de consumirlas
- En el caso de la carne picada de vaca se debe cocinar a temperaturas superiores a los 70º C
- Recomiendan que la carne cruda se guarde separada de otros alimentos
- Lavar con agua caliente y jabón las superficies que hemos usado en la cocina
- No volver a usar el plato en el que ha estado la carne cruda hasta que no se lave