Mas anuncia nuevas detenciones y el conseller de Interior habla de "guerrilla urbana" en Cataluña
- Promete un Govern "no beligerante pero sí contundente"
- Espera que los altercados terminen en los tribunales
- El conseller de Interior habla de nuevos métodos de violencia urbana
- Puig niega que mossos infiltrados incitaran a la violencia
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha anunciado que en las próximas horas se producirán nuevas detenciones de los violentos que llevaron la "kale borroka" a las puertas del Parlament, contra los que espera que los tribunales dicten un "castigo ejemplar".
En la sesión de control parlamentario al presidente catalán, Mas ha prometido que su Govern será "no beligerante pero sí contundente y tremendamente exigente" contra los "auténticos cafres" que este miércoles agredieron físicamente a los diputados que intentaban acceder al Parlament para asistir al debate sobre los presupuestos.
Mas ha revelado que "ya desde ayer el Govern se puso en contacto con la Fiscalía", que tiene "la máxima buena predisposición" para abrir diligencias contra los violentos. "Espero que esto no acabe sólo en el ámbito de la Fiscalía sino que pase a los tribunales", ha añadido.
“Mas: El dispositivo se hizo pensando en una protesta pacífica“
Mas ha reconocido que el dispositivo policial frente al parque de la Ciutadella se montó pensando en una protesta "pacífica" de los 'indignados' y no en una "kale borroka" contra los diputados.
Después de que diputados de la oposición hayan empezado a dejar patente su malestar con el conseller del Interior, Felip Puig, por el dispositivo de los Mossos d'Esquadra en los alrededores del Parlament, Mas ha admitido que este tema "es materia opinable".
Conseller de Interior habla de nuevos métodos de violencia urbana
El conseller de Interior de Cataluña, Felipe Puig, ha sido muy duro con las personas que protagonizaron la violenta protesta. Ha hablado de "guerrilla urbana en Cataluña", de nuevos métodos de "violencia urbana extrema", de "iniciativas de desobediencia civil" y de "atentado contra el funcionamiento democrático".
En una comparecencia de prensa para explicar el dispositivo policial en los alrederores del Parlament, ha dicho que se trata de violentos que se escudan en colectivos "cargados de buena fe".
Ha explicado que algunos de los seis detenidos por los altercados ya tenían antecedentes penales. También ha reconocido, en la misma línea de Mas, que el dispositivo no preveía la "virulencia" de la protesta y que en algunos momentos faltaron recursos.
"No fuimos capaces de atender las necesidades de los diputados en todo momento", ha reconocido.
“Puig: En algunos momentos faltaron recursos“
Justifica el uso de los helicópteros
El conseller de Interior ha señalado que fue necesario el uso de helicópteros para el traslado de los diputados porque la situación era "excepcional". "Había que garantizar el inicio del pleno y era imposible garantizar un cordón policial de más de un kilómetro para la llegada en coche porque eso supondría descuidar otras zonas que había que vigilar", ha explicado.
Puig ha reconocido que en estos grupos violentos hay infiltrados de los Mossos d'Esquadra pero ha dejado claro que no se infiltran para agredir. Ha señalado que algunos de los vídeos que han circulado por internet son "montajes".
"Había ganas de entablar una feroz batalla campal. Hubo momentos de gran dificultad y de riesgo extremo", ha dicho, tras explicar que en los "momentos algidos" de la protesta intervinieron 600 efectivos policiales.
El dispositivo policial se planteó tres objetivos, ha explicado, que se cumplieron: Proteger las inmediaciones del Parlament con el cierre del parque de Ciutadella, el desarrollo normal del pleno y la salida de los diputados sin incidentes.
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