Barcina y Diego se estrenan al frente de los gobiernos de Navarra y Cantabria

• Juan Vicente Herrera revalida su cargo como presidente de Castilla y León
• Yolanda Barcina, presidenta de Navarra con los votos de UPN y PSN
• Ignacio Diego (PP) dice que gobernará Cantabria para todos, sin revanchismo

La candidata regionalista Yolanda Barcina ha sido elegida este jueves presidenta del Gobierno de Navarra en primera votación, por mayoría absoluta con los votos a favor de UPN y PSN,  mientras que el resto de la oposición, Nafarroa Bai, Bildu, PP e Izquierda-Ezkerra ha votado en contra.

También ha sido elegido el nuevo presidente de Cantabria, Ignacio Diego (PP), que en el debate de investidura ha asegurado que gobernará "para todos", sin "revanchismo". Diego ha tenido el voto a favor de los 20 diputados del grupo popular y la oposición del PRC, con 12 diputados, y del PSOE, con siete.

Además, el líder del PP en Castilla y León, Juan Vicente Herrera,  ha revalidado su cargo por cuarta vez con su investidura como presidente del Ejecutivo autonómico, al recibir los apoyos de la mayoría absoluta del parlamento autonómico, ejercida por los 53 procuradores del PP. Han votado en contra de la investidura de Herrera los 29 procuradores que integran el Grupo Socialista, con su portavoz Óscar López a la cabeza, y los dos del Grupo Mixto, su portavoz José María González (IU) y el leonesista Alejandro Valderas.

UPN y PSN materializan el acuerdo

UPN y PSN han materializado así el acuerdo alcanzado esta semana para la formación de un gobierno de coalición, que otorgará cinco consejerías y una vicepresidencia a UPN y otras tres consejerías y una vicepresidencia a PSN,  y cuyo programa pactado ha desgranado Barcina en su discurso de investidura.

Así, la que ha sido alcaldesa de Pamplona en los últimos 12 años y desde este jueves es la primera mujer de la historia en presidir un Ejecutivo foral, ha defendido el pacto con PSN en aras a la "estabilidad" necesaria para conseguir el progreso de Navarra, que se buscará con un Ejecutivo "sólido" y "austero" y con la creación de empleo como "prioridad", en una tarea "ilusionante" y "no exenta de retos" en la que ha expuesto su "predisposición al diálogo".

Protagonismo especial, por la ausencia en la última legislatura de sus representantes, ha tenido la presencia de nuevo de la izquierda abertzale en la Cámara foral, a la que se han referido los partidos que desde la próxima semana conformarán Gobierno, y Barcina ha advertido que "acata pero no comparte" la legalidad de Bildu.

El PP quiere gobernar Cantabria "para todos"

El 'popular' Ignacio Diego, por su parte, sucede en el cargo al regionalista Miguel Ángel Revilla, que abandona el Gobierno tras 16 años en el Ejecutivo: ocho como vicepresidente en alianza con el PP (1995-2003) y ocho como presidente en coalición con el PSOE (2003-2011).

Diego, quien tomará posesión del cargo el lunes por la tarde, será el séptimo presidente en la historia de Cantabria como comunidad autónoma, tras José Antonio Rodríguez (AP), Ángel Díaz de Entresotos (AP), Juan Hormaechea (PP y UPCA), Jaime Blanco (PSOE), José Joaquín Martínez Sieso (PP) y Miguel Ángel Revilla (PRC).

El PRC y el PSOE, que han gobernado Cantabria en coalición durante ocho años, han votado en contra de la investidura del líder del PP por el tono de su discurso, en su opinión más propio de la oposición, y porque, a su juicio, no ha dado a conocer su proyecto para la región.

La investidura se ha producido después de un debate en el que el nuevo presidente ha reiterado que su "obsesión y vocación" es el empleo y el buen Gobierno; ha prometido "trabajo, trabajo y trabajo" leal y honesto para dejar Cantabria mejor de lo que la ha recibido y ha ofrecido consensos al PRC y el PSOE.

El nuevo presidente ha asegurado que gobernará "para todos" y ha hecho hincapié en que no habrá recortes sociales por muy mal que el PRC y el PSOE le hayan dejado las arcas.

Herrera, investido por cuarta vez en Castilla y León

Con la votación en Castilla y León se ha culminado el debate de investidura de Juan  Vicente Herrera como presidente autonómico, una sesión que ha durado  unas cinco horas.

Por la mañana, Herrera ha planteado que su "gran prioridad" será  desarrollar políticas que beneficien la creación de empleo, ha ofrecido  un Pacto de Comunidad para "blindar" los servicios públicos y ha  anunciado una batería de medidas para reducir el gasto público, entre  otras la reducción del 20 por ciento de los altos cargos de la Junta y  la supresión de al menos tres consejerías, de las doce que actualmente  tiene el Ejecutivo autonómico.

En su diagnóstico sobre la actual coyuntura socioeconómica que "ha  empobrecido a todos", Herrera ha insistido en la idea de que Castilla y  León ha resistido a la crisis mejor que el conjunto del Estado, y que lo  ha hecho además con una prestación de servicios públicos valorados por  informes externos y por usuarios.

El líder de la oposición, el socialista Óscar López,  se ha ofrecido para  trabajar por la creación de empleo y por la defensa del estado del  bienestar como si existiera "un gobierno de concentración" en Castilla y  León, mientras que se opondrá con "contundencia" si se retrocede en  derechos y libertades.