España seguirá endeudándose y siendo vulnerable a los mercados, según Funcas
- Aboga por compatibilizar el crecimiento de la demanda con el equilibrio exterior
- El consumo debería aumentar sin reducir la tasa de ahorro
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La Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) prevé que la economía española continúe endeudándose y siendo "muy vulnerable" a las alteraciones de los mercados financieros internacionales, por lo que considera prioritario compatibilizar el crecimiento de la demanda interna con el equilibrio exterior.
En el último número de Cuadernos de Funcas, el economista y ex presidente de la patronal bancaria AEB José Luis Leal señala que "el problema consiste en saber si el año que viene la renta disponible de las familias permitirá por sí sola un aumento del consumo o si será necesaria una nueva reducción de la tasa de ahorro para lograrlo".
Más consumo
Los expertos de la Unión Europea -recuerda- piensan que no será necesaria esta última hipótesis y que será posible un aumento del 1,1% del consumo privado sin variación de la tasa de ahorro, además de prever que el déficit de la balanza por cuenta corriente se estancará en torno al 4% del PIB.
"No podemos decir que este pronóstico, en sí mismo razonable, sea muy alentador, pues significa que la economía española continuará endeudándose, por lo que permanecerá su vulnerabilidad ante los vaivenes que producen las alteraciones de los flujos de financiación mundiales", concluye.
La prima de riesgo de la deuda española rebasaba los 300 puntos básicos en el mercado secundario. Después se relajaba pero continuaba al borde de los máximos alcanzados en noviembre, cuando estalló la crisis de la banca irlandesa.
Coste "excesivo" de una rebaja fiscal
Una rebaja del IRPF destinada a impulsar la economía hasta alcanzar el crecimiento del 2,5% necesario para iniciar la creación de empleo neto tendría un coste recaudatorio de 25.000 millones de euros, es decir, supondría una reducción del 35% de los ingresos previstos en este impuesto para este año.
Los profesores Victorio Valle, José Félix Sanz y Desiderio Romero consideran que una rebaja fiscal en este sentido supondría un "coste excesivo", que acentuaría el déficit "absolutamente inabordable" que soportan las administraciones públicas.
Además, añaden que si se redujeran también los gastos públicos, el efecto de una rebaja fiscal se vería fuertemente mermado y, bajo ciertos supuestos, incluso podría tener un "efecto global contractivo". Así, indican que la utilización de las reducciones impositivas como forma de estimular la economía son más efectivas en etapas de crecimiento que en fases de atonía como la actual.
Los autores del estudio recuerdan que la reducción de 400 euros practicada en los ejercicios 2008 y 2009 en el IRPF "no puede decirse que haya aportado resultados brillantes al crecimiento y, sin duda, contribuyó a elevar los ya de por si elevados déficit de esos ejercicios".