Ashton propone a Bernardino León como representante de la UE para la 'Primavera Árabe'

• Propone a los 27 que el secretario general de la Presidencia ocupe el puesto
• Recuerda su experiencia como embajador y jefe de gabinete de Moratinos
• Zapatero dió por hecho su nombramiento tras el Consejo Europeo 
• Se encargará de gestionar el papel de Europa en la ola democrática en la zona

La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de  la UE, Catherine Ashton, ha propuesto este miércoles formalmente al  actual secretario general de la Presidencia del Gobierno español,  Bernardino León, como nuevo representante especial de la UE para la  región del Mediterráneo Sur, según han confirmado fuentes  diplomáticas europeas.

La jefa de la diplomacia europea ha remitido este miércoles una  carta, fechada el 29 de junio, a los Veintisiete embajadores ante el  Comité Político y de Seguridad de la UE, que el pasado martes acordó el mandato  para el cargo, pidiéndoles que respalden el nombramiento de León,  según han confirmado las mismas fuentes.

"Tengo el honor de proponer a Bernardino León como candidato mío  para el puesto de representante especial de la UE", reza la misiva  enviada por Ashton a los Veintisiete, según han explicado fuentes  diplomáticas.

Experiencia diplomática

Ashton ha destacado que León tiene más de 20 años de experiencia  diplomática y que la mayor parte de su carrera ha estado vinculada al  mundo árabe, incluido en Libia y Argelia y cuando ejerció como jefe  de Gabinete de Miguel Angel Moratinos mientras éste fue enviado  especial de la UE para Oriente Próximo.

Asimismo, ha destacado el puesto de responsabilidad actual de León  como "principal asesor" de relaciones exteriores del presidente del  Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, así como sus  funciones en calidad de 'sherpa' para el G-20.

"Confío en que reforzará el diálogo político de la Unión Europea  en los países de la región y contribuirá a la respuesta ambiciosa de  la UE a la 'Primavera árabe'", reza la misiva de la alta  representante.

Esta decisión de Ashton alivia un poco la decepción española después de que el pasado domingo el antiguo jefe de León, Miguel Ángel Moratinos, no lograse hacerse con el mandato de la FAO, que dirigirá el brasileño Da Silva.

Una vez propuesto para el cargo, el nombramiento de León deberá  ser ratificado por los Veintisiete, aunque podrían hacerlo por el  procedimiento escrito, más rápido, sin necesidad de reunirse de  nuevo, según han confirmado distintas fuentes diplomáticas que han  explicado que la designación de León podría darse esta misma semana. 

Zapatero dio por hecho el viernes pasado durante la Cumbre Europea  en Bruselas que León asumirá el cargo tras destacar la "unanimidad"  entre los Veintisiete y confió en que su nombramiento se pudiera  concretar "en los próximos días", una vez se termine el proceso  legislativo interno para crear el cargo.

El Gobierno español cuenta con que León pueda asumir el cargo "en  julio", según confirmaron el viernes pasado fuentes de  Moncloa.

Mandato en el Magreb

Una vez acordado el mandato, expertos de los Veintisiete  representados en el grupo de trabajo de Relaciones Exteriores (RELEX)  deben acordar todavía el presupuesto y personal que tendrá asignados  el nuevo cargo, han explicado fuentes diplomáticas españolas, algo  que se espera que se analice esta misma semana.

Los embajadores acordaron el martes el mandato del  representante especial, que tendrá derecho "de iniciativa propia" en  los países de la región del Magreb y del Mashreq (la zona oriental  del mundo árabe) pero no así en los países de la Península arábiga,  tal y como ha reclamado Reino Unido sobre todo.

Sin embargo, si Ashton considera que más adelante "se justifica",  y "a propuesta" expresa suya o de los Veintisiete, el representante  especial podrá tener capacidad de iniciativa propia también en países  como Yemen o Bahréin,  han precisado fuentes diplomáticas europeas.

El representante especial de la UE para el Sur del Mediterráneo  tendría mandato de un año, hasta el 30 de junio de 2012, aunque  podría terminar sus funciones con anterioridad si así lo acuerdan los  Veintisiete a propuesta de Ashton. Dispondrá de un equipo y  presupuesto de trabajo propios todavía pendientes de acordar y tendrá  inmunidad diplomática.

El grupo de trabajo creado estará integrado por representantes del  Servicio de Acción Exterior Europeo, la Comisión Europea, el Banco  Europeo de Inversiones (BEI) y el Banco Europeo de Reconstrucción y  Desarrollo (BERD), así como por representantes de otras  organizaciones y contribuirá a canalizar la ayuda comunitaria para  los países vecinos que acepten impulsar reformas democráticas.

La UE destinará 1.240 millones de euros adicionales de aquí a 2013  para apoyar en este caso las necesidades urgentes de los países en  transición.

En total destinará cerca de 7.000 millones de euros en  los próximos tres años para apoyar las reformas democráticas en los  países vecinos de la UE.