Zapatero se centra en las reformas, mientras que Rajoy se preocupa más de la crisis y el paro

• La palabra "reforma" fue la más repetida por el presidente del Gobierno
• Rajoy, en cambio, se centró en el paro y la crisis
• Vea cuáles fueron las palabras claves

Las reformas para hacer frente a la crisis económica, así como la crisis en sí misma y el empleo fueron las palabras claves que protagonizaron los discursos tanto del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, como del presidente del PP, Mariano Rajoy, durante el Debate del Estado de la Nación, según muestra la aplicación de RTVE.es.

Gran parte de la intervención de Rodríguez Zapatero estuvo centrada en las medidas de reformas que ha aprobado el Ejecutivo para encarar la situación de crisis económica actual. Por contra, Rajoy se centró más en el problema del paro y en que la "situación económica puede ir a peor".

"El Gobierno viene abordando, y abordará, todas las reformas necesarias y desea llegar en ellas tan lejos como sea aconsejable", explicaba Rodríguez Zapatero en un momento de su discurso.

Pero no solo el presidente habló de "reformas". También lo hizo el líder lo de los populares. De este modo, esta palabra fue la más repetida en todo el debate. Así, el presidente se refirió a ella en 48 ocasiones, mientras que Rajoy pronunció "reformas" en 17 ocasiones.

Rodríguez Zapatero la mencionó sobre todo para defenderlas, porque a su juicio, serán útiles a largo plazo "gobierne quien gobierne". Por su parte Rajoy, aunque se mostró a favor de las reformas puso en duda su puesta en marcha real. "Pr qué debemos suponer que el señor Rodríguez Zapatero va a realizar en cuatro meses lo que no ha podido -o no ha querido-, o no le ha convenido hacer en estos años", se preguntaba el presidente del PP.

El empleo y el paro

También fue muy escuchada la palabra "empleo" durante todo el debate, en especial, durante la intervención de Rodríguez Zapatero. En concreto, el presidente la mencionó en 44 ocasiones, frente a las nueve veces que la pronunció el líder de la oposición.

En su defensa de la reforma laboral acometida por el Gobierno, el jefe del Ejecutivo recordó que "su principal objetivo es la creación de empleo". Asimismo reconoció que "sin la aportación negativa de la construcción, estaríamos creando empleo".

Rajoy, por contra, le recordó algunas de las promesas que había realizado el presidente como que esta "iba a ser la legislatura del pleno empleo", y le reprochó que no lo hubiera cumplido.

Sin embargo, el paro, aunque es una de las mayores preocupaciones de los españoles, no fue una de las palabras más repetidas durante el debate. Apenas en 17 ocasiones fue mencionada. Rodríguez Zapatero pronunció la palabra "paro" en siete ocasiones, frente a las diez veces que lo hizo Rajoy.

El presidente del Gobierno aseguró que había "indicadores alentadores, pero claramente insuficientes" en torno al paro. Para Rajoy, tales indicadores no eran visibles ya que a su juicio, este es un país "que se desangra por el paro y la deuda". Asimismo insistió en que el paro era "el elgado de Zapatero".

La crisis y los 'indignados'

La situación de crisis económica fue otra de las palabras que más se escucharon durante el Debate del Estado de la Nación. Este asunto fue uno de los que acaparó parte de la intervención del presidente del Gobierno quien confirmó que la "reciuperación es gradual y demasiado lenta para producir empleo neto", por lo que no era posible "dar por terminada la crisis".

Rajoy, en cambio, se refirió a ella sobre todo para acusar a Rodríguez Zapatero de echar balones fuera, por "culpar de nuestros problemas a la crisis internacional". En total, se mencionó la palabra "crisis" en 49 ocasiones, 39 veces lo dijo Rodríguez Zapatero y 10, Rajoy.

Y aunque el Movimiento del 15M ha sido el protagonista de numerosas noticias en las últimas semanas, ninguno de los que participaron en el debate mencionaron su nombre de manera clara. Bien es cierto, que Rodríguez Zapatero les lanzó algunos guiños como cuando prometió una mayor protección para quienes se enfrenten a una ejecución hipotecaria por no poder pagar el préstamo.