Hizbulá asegura que no habrá guerra civil en el Líbano por el caso de Hariri
- Hibulá siempre ha negado su implicación en el asesinato de Hariri
- Sin embargo, los cuatro acusados por su muerte pertenecen a este grupo
El líder de Hizbulá, Hasan Nasralá, ha asegurado este sábado que no habrá una guerra civil en el Líbano ni un conflicto sectario por las conclusiones del tribunal internacional que investigó el asesinato del exprimer ministro libanés Rafic Hariri en el 2005.
"No habrá conflicto entre sunies y chiíes, no habrá una guerra civil. Todos deben confiar y estar tranquilos. Debe haber un gobierno responsable y dispuesto a tratar de uan forma nacional un acontecimiento de dicha índole", dijo Nasralá en una videoconferencia transmitida por las televisiones libanesas.
Y ello a pesar de que, según Nasralá, el Tribunal Especial para el Líbano "tiene varios objetivos, entre ellos, atentar contra la imagen de la Resistencia (brazo armado de Hizbulá) y causar un conflicto entre libaneses, sobre todo, entre suníes y chiíes".
En ese sentido, ha acusado a la corte de no permitir que se lleven a cabo pesquisas sobre Israel y de cooperar con él.
"Este tribunal desde su creación no ha permitido a nadie investigar a Israel. Ellos (los investigadores del tribunal) han ignorado y desatendido las pruebas", ha asegurado.
Hizbulá acusa a Israel
Esa organización siempre ha negado la implicación de alguno de sus militantes en este caso y en agosto del año pasado Nasralá dio a conocer hechos y fotos, aunque no pruebas contundentes, sobre la presunta implicación de Israel.
Nasralá se quejó de que los investigadores del Tribunal Especial para el Líbano "cooperaron con Israel" en vez de prestar atención a las pruebas presentadas por su grupo.
A lo largo del discurso del cabecilla de Hizbulá se han intercalado imágenes que supuestamente demostraban que la mayoría de los empleados del tribunal están relacionados con Israel, la CIA o el FBI.
Nasralá ha acusado, además, de corrupción a los trabajadores del tribunal y se ha mostrado una grabación en la que uno de los ayudantes, el exfiscal del tribunal Detlev Mehlis, supuestamente recibía dinero.
Cuatro acusados de Hizbulá
Según los medios de comunicación libaneses, las cuatro personas acusadas de estar involucradas en el magnicidio de Hariri son cuatro miembros del grupo chií Hizbulá, identificados como Mustafa Badredin, Selim Ayyash, Assad Sabra y Hasan Anaisse.
Sobre esas cuatro personas, Nasralá ha destacado que "tiene una historia de resistentes contra la ocupación".
El ministro libanés del Interior, Maruan Charbel, se mostró el viernes ambiguo sobre la filiación política de los inculpados, ya que pese a que negó en un comunicado haber revelado su identidad como dijeron algunos medios de información, afirmó implícitamente que se trata de miembros de Hizbulá.
Desde el jueves pasado, las autoridades del Líbano disponen de 30 días para cumplir con los mandatos de arresto, y pasado ese plazo, se hará publica el acta de acusación y se convocará a los acusados ante la sede de la corte internacional, en Holanda.