Mladic, expulsado del tribunal de La Haya tras negarse a escuchar los cargos contra él
- El Tribunal le ha denegado retrasar el momento de su declaración
- Se ha quitado los cascos para no escuchar los cargos
- Se ha enfrentado con familiares de las víctimas con gestos burlones
Finalmente el exlíder militar serbobosnio Ratko Mladic ha comparecido ante el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) y lo ha hecho para desafiar a los jueces ya que se ha negado a declararse culpable o inocente de los cargos por crímenes de guerra y genocidio que pesan contra él.
Nada más comenzar la sesión, que no ha durado más de diez minutos, Mladic ya ha dejado claro cuál iba a ser su actitud: no se quería quitar la gorra, ha intentado interrumpir al juez en reiteradas ocasiones y se ha desprendido de los cascos para no escuchar los cargos. Ha sido en ese momento en el que ha empezado a gritar calificando la acusación de "desagradable" y "monstruoso".
"No, no, no voy a escuchar esto sin mi abogado", ha gritado Mladic mientras se quitaba los auriculares de traducción cuando el juez Alphons Orie ha comenzado a leer los cargos.
"¿Quién eres tú? No eres quien me permite respirar", ha ironizado el exlíder militar.
Todo esto ha generado que finalmente haya sido expulsado de la sala, algo que no le ha impedido enfrentarse también con un grupo de familiares de las 8.000 víctimas de la matanza de Srebrenica de 1995 han acudido a la galería del juicio, profiriendo gritos de "criminal" al imputado, que se ha encarado con ellos mediante gestos burlones.
De este modo ha terminado la gran expectación que se había generado tras haber amenazado con no comparecer en la sesión prevista para este lunes.
El juez Orie, siguiendo los estatutos de este tribunal de la ONU en los que prevalece el principio de presunción de inocencia, ha recogido de forma automática la "no culpabilidad" de los once cargos de crímenes de guerra y genocidio que pesan sobre él para poder proseguir con el proceso.
Por su parte, la portavoz de las Mujeres de Negro de Belgrado, que representa a las madres de Srebrenica en el juicio contra el exjefe militar de los serbios de Bosnia Ratko Mladic, ha denunciado que éste se haya presentado como un imputado indefenso ante el Tribunal Penal Internacional de la ex Yugoslavia (TPIY).
"El verdugo Mladic quiere convertirse en víctima. Es el juego de todos los criminales de guerra", ha señalado Stasa Zajovic, después de que el exgeneral serbio se negase a declararse culpable o inocente alegando que quería su propio equipo de abogados y no el letrado asignado de oficio.
Zajovic ha explicado tras la comparecencia que la veintena de familiares de víctimas de Srebrenica se han encarado contra el general y han clamado que el TPIY dicte sentencia contra Mladic antes de que muera.
"Las víctimas no podemos olvidar que Slobodan Milosevic muriese sin escuchar su sentencia. Fue un gran error y un símbolo de impunidad", ha explicado la activista.
El boicot de Mladic al tribunal representa "un juego peligroso para las nuevas generaciones de nacionalistas serbios", ha explicado.
"Algunos nuevos intelectuales que apoyan a Mladic en Serbia defienden teorías como que en Srebrenica no murieron 8.000 musulmanes en 1995, sino 400 jóvenes varones musulmanes", ha apuntado Zajovic.
Las líneas de su defensa
Esta comparecencia era su última oportunidad para declararse, personalmente, culpable o inocente antes de que empiece el proceso oral.
Su abogado, Milos Saljic, había comunicado la pasada noche en Belgrado que Mladic no comparecerá "si no es obligado".
Cuando el exgeneral compareció por primera vez en el TPIY, el pasado 3 de junio, Mladic señaló que prefería posponer su declaración porque necesitaba tiempo para leer con calma la acusación, de la que dijo que contenía cargos "monstruosos".
Ante los jueces del TPIY, el acusado afirmaba el pasado junio que él se había limitado a defender a su gente y a su país durante el conflicto bélico en Bosnia, con lo que rechazaba las acusaciones y dejaba entrever la que podría ser una de las principales líneas argumentales de su defensa.
Considerado el "carnicero de Srebrenica", Mladic está acusado de genocidio por la matanza de unos 8.000 musulmanes en esa ciudad bosnia en 1995 y también se le acusa, entre otras cosas, de crímenes de lesa humanidad y de guerra presuntamente ocurridos durante el asedio de Sarajevo, que se cobró 10.000 vidas durante la guerra bosnia (1992-1995).