"La satisfacción cuando rescatas a alguien con vida del agua es increíble"

• Un socorrista cuenta la cara y la cruz de los rescates acuáticos
• Según Cruz Roja cada año mueren ahogadas entre 70 y 150 personas
• Los ahogamientos son la segunda causa de muerte accidental infantil
• Un 77% de los niños ahogados fue perdido de vista solamente cinco minutos

Recomendaciones para los bañistas y los que navegan en verano

"Un minuto más y lo hubiéramos perdido". Es el testimonio de Juan Antonio Aroca, gerente de 'Viento Norte' y socorrista especializado en rescates en lagunas y pantanos, concretamente en las lagunas de Ruidera.

Según los datos de Cruz Roja en España mueren ahogados entre 70 y 150 personas al año. En Europa, 5.000 niños y jóvenes menores de 20 años fallecen al año por la misma causa.

"El año pasado rescatamos a un niño que estaba en una colchoneta y se alejó de la orilla, se puso nervioso y cayó al agua. El socorrista tuvo que bucear para sacar al pequeño que ya estaba hundido, un minuto más y hubiera fallecido", recuerda Aroca.

“Muchas veces es necesario dar apoyo psicológico a los socorristas“

Acostumbrado a rescatar a personas contrarreloj, este socorrista cuenta la cara y la cruz de su trabajo. "La satisfacción cuando sacas a alguien con vida del agua es increíble, pero la cruz es cómo te quedas cuando no puedes hacer nada por esa persona y acaba falleciendo, por ello muchas veces es necesario dar apoyo psicológico a los socorristas", explica a RTVE.es.

“La cruz es cómo te quedas cuando no puedes hacer nada“

A finales de este mes de junio murió una persona en las lagunas de Ruidera, era un pescador al que problamente le dio un golpe de calor y murió ahogado.

La víctima estaba en una zona no habilitada para el baño, por eso Juan Antonio Aroca recuerda lo importante que es bañarse en las zonas habilitadas y durante las fechas y horarios en los que hay vigilancia. En el caso de estas lagunas los servicios de socorrismo comienzan el 1 de julio y acaban el 31 de agosto, por lo que todas las personas que se bañen fuera de estos límites lo hace sin ningún tipo de vigilancia.

"Muchos bañistas no son conscientes del peligro que hay en las lagunas, los cambios de nivel, el agua turbia, los remolinos o las corrientes internas pueden llegar a ser muy peligrosas", cuenta.

El protocolo de rescate en pantanos y lagunas está perfectamente definido con el objetivo de que se haga lo más rápido posible. "Primero los socorristas detectan la emergencia, luego avisan por emisora a la central, inician el rescate y se pone en marcha el operativo de asistencia médica", explica Aroca.

Recomendaciones

Las recomendaciones que hacen los expertos para bañarse con seguridad en embalses y pantanos son muy importantes. Primero es aconsejable reconocer la zona antes del baño, ya que las rocas pueden causar lesiones a la hora de zambullirse en el agua.

También se recomienda no alejarse de la orilla, ya que las distancias aparentemente son cortas cuando se observan desde fuera del agua, pero nadando, y teniendo en cuenta la vuelta, las fuerzas pueden fallar además del riesgo que suponen las embarcaciones.

Especial cuidado hay que tener con las colchonetas ya que a consecuencia del viento, pueden alejar al bañista de la orilla. Además, el objeto se puede pinchar con facilidad, lo que da lugar a situaciones peligrosas.

Con la llegada del verano y el incremento de las actividades acuáticas aumenta también el riesgo de sufrir accidentes. El Ministerio de Sanidad estima que alrededor de 50.000 personas de toda la Unión Europea sufren al año algún tipo de lesión mientras practican deportes acuáticos o actividades de navegación típicas de la temporada estival.

Segunda causa de muerte en jóvenes

El ahogamiento se ha convertido en la segunda causa de muerte en personas jóvenes en edades comprendidas entre la infancia y los 18 años, solo superadas por las muertes en accidentes de tráfico.

Ahogamientos en piscinas, la segunda causa de muerte en los jóvenes.

Los datos hablan por si solos. Según los que maneja el Instituto Nacional de Estadística, en 2009 -último año del que disponen datos oficiales- murieron en toda España 2.292 personas por ahogamientos, sumersión o sofocación accidental.

El año pasado al menos 214 personas tuvieron que ser ingresadas en diferentes hospitales españoles a consecuencia de ahogamientos. De ellas, una de cada tres eran jóvenes menores de 14 años.

Lesiones medulares

En España cada año se producen entre 800 y 1.000 lesiones medulares. De ellas, entre el 4% y el 11% se deben a actividades deportivas o de ocio propias de la temporada estival. El 5% del total de atendidos por lesiones medulares lo fueron por zambullidas en piscinas o similares.

“Hay que evitar que los niños se tiren de cabeza cerca del borde“

"Para evitar las lesiones medulares es importante evitar que los niños se tiren al agua de cabeza cerca del borde", explica Rubén, socorrista de una piscina de la Comunidad de Madrid en declaraciones a Radio Nacional.

Según apunta el socorrista "es más fácil controlar a los jóvenes en las piscinas que en otras zonas de baño". "Lo que es realmente peligroso es cuando se bañan en sitios no habilitados para ello como pueden ser algunos ríos, pantanos y lagos", explica Rubén.

Los traumatismos craneoencefálicos por zambullidas en zonas no adecuadas para el baño pueden tener graves consecuencias y ocasionar una discapacidad residual en el 50% de los casos. Como apunta Cruz Roja zambullirse de cabeza en lugares con fondo desconocido es la causa del 6% de las lesiones medulares en España y representa la tercera causa de invalidez permanente en los menores de 25 años.

También los casos de ahogamientos pueden ser un grave problema, ya que algunas de las personas que sobreviven padecen un daño cerebral permanente.

Según una estadística de Cruz Roja la mayoría de las personas que han sufrido algún accidente de este tipo entienden que las lesiones que sufrieron son puramente fortuitas, aunque el 25,5% atribuyen el percance a imprudencias o temeridades y un porcentaje algo menor, el 25,3% a descuidos o distracciones.

"Disfruta del agua y evita los riesgos"

El Ministerio de Sanidad ha publicado la guía "Disfruta del agua evita los riegos" cuyo objetivo es proteger de los riesgos para la salud en el marco del plan estival 2011.

Está dirigida principalmente a menores y jóvenes a los que se intenta enseñar a prevenir las lesiones graves que suceden en medio acuático: ahogamientos, lesiones medulares por zambullidas y traumatismos craneoencefálicos y a disfrutar del agua adoptando una conducta segura.

La guía aconseja sobre una serie de medidas a tener en cuenta para evitar los peligros a la hora del baño, como no lanzarse al agua en zonas desconocidas, comprobar cuidadosamente la profundidad antes de sumergirse, evitar el buceo o saltar en aguas turbias donde pueden no ser visibles otros nadadores u objetos.

¿Qué hacer en caso de accidente?

La guía también da algunos consejos en caso de sufrir un accidente e indica qué hacer en cada caso. Ante la necesidad de traslado, hay que inmovilizar el cuello del herido, evitar mover la columna y avisar a un profesional para que acompañe al accidentado, evitando -dentro de lo posible- los vehículos particulares.

"Disfruta del agua y evita los riesgos" contiene algunos mensajes que recuerdan que hay que respetar las normas de seguridad y bañarse en zonas con socorristas, que se debe vigilar atentamente a los menores cuando están en el agua o jugando cerca de ella y que el ahogamiento se produce de forma rápida y silenciosa.

“El 77% de los niños ahogados fue perdido de vista solamente cinco minutos“

La guía lanzada por el Ministerio de Sanidad en colaboración con Cruz Roja alerta de que muchos ahogamientos se producen en el entorno familiar y que la mejor medida de seguridad en las piscinas privadas es un cercado que las aisle de la vivienda.

Además aconsejan vigilar constantemente a los menores durante todo el tiempo que dura el baño ya que el 77% de los niños ahogados fue perdido de vista solamente cinco minutos.