Salgado sobre la participación de la banca en el rescate griego: "No es una buena idea"

• La vicepresidenta económica pide "prudencia"
• Se muestra a favor de estudiar "todas las alternativas" antes del Eurogrupo
• Schäuble reconoce en privado que ha perdido la batalla

Elena Salgado, ministra de Economía.

La participación del sector privado en el futuro plan de ayuda a Grecia "no es una buena idea", según ha valorado la vicepresidenta económica, Elena Salgado, en una entrevista en el diario alemán Süddeutsche Zeitung. Sus palabras adquieren especial significación puesto que Berlín ha insistido en la participación de los bancos en el segundo rescate griego y ha puesto palos en las ruedas para evitar una reunión extraordinaria en la que se aprobaría el programa de ayuda.

Precisamente, la agencia de calificación Fitch acaba de dejar a Grecia al borde del impago -no puede bajarle más la nota a no ser que quiebre-, con el argumento de que no hay un "programa de rescate de la UE para Grecia".

Salgao ha señalado que siempre ha defendido que "hay que ser muy prudente porque una participación del sector privado para resolver el problema griego no es una buena idea".

Schäuble a punto de tirar la toalla

Según otro medio germano, el Handesblatt, el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, reconoce en privado que ha perdido la batalla de la participación de la banca, si bien en público sigue defendiendo una fuerte intervención del sector privado. "En el estado actual de las cosas, este proyecto es altamente improbable", según una fuente ministerial citada por el periódico.

“Este proyecto es altamente improbable“

Los europeos siguen desojando la margarita y valoran otras opciones como la recompra de la deuda griega en el mercado a través del mecanismo europeo de estabilidad financiera (FESF, por sus siglas en inglés), una solución preferida por Atenas pero que no ha logrado la unanimidad en el seno de la zona euro.

A favor de estudiar "todas las alternativas" antes del Eurogrupo

La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, se ha mostrado partidaria de que se estudien "todas las alternativas" para tratar de frenar el recrudecimiento de la crisis de la deuda antes de celebrar la próxima reunión del Eurogrupo, que en principio estaba prevista para este viernes.

Salgado ha afirmado que a su nivel hace "lo que puede", es decir, "alguna gestión o alguna sugerencia de manera discreta" para que se produzca la reunión de ministros.

Ha dicho que "en este momento los equipos técnicos están trabajando mucho" para encontrar acuerdos capaces de disipar las dudas de los mercados y ha recalcado que "no se puede dar la idea de que porque no haya una reunión signifique que no estamos trabajando".

En cuanto al duro plan de ajuste que aprobará este jueves Italia para contrarrestar la inestabilidad del mercado, Salgado ha reclacado que "será bueno" para el país transalpino.

Preguntado en los pasillos de la Cámara baja sobre los futuros encuentros económicos, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha limitado a contestar que "en algún momento se producirán".

El presidente del Congreso, José Bono,  ha afirmdo que "haya o no reunión", lo que las circunstancias requieren en este momento es que tanto el PSOE como el PP defiendan "los intereses comunes" de España, que son "más importantes" -ha recalcado- que "defender intereses electorales".

Las reservas de Alemania no han permitido la convocatoria para este viernes de una cumbre extraordinaria de los países del euro para tratar de frenar el recrudecimiento de la crisis de la deuda y todo apunta a que la reunión podría retrasarse como mínimo hasta este fin de semana.

El presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, mantuvo el miércoles los contactos con las diecisiete capitales de la zona del euro, mientras su equipo daba por hecho una inminente convocatoria del encuentro, que no ha llegado debido a que Alemania desea contar antes con un acuerdo concreto que poder anunciar en la cita.