Italia aprueba el plan de ajuste de 79.000 millones para los próximos tres años
- Incluye el recorte de las pensiones y de los beneficios fiscales.
- Además, se incorpora el copago sanitario y el retraso de la jubilación.
- El texto es el mismo que aprobó el Senado este jueves.
La Cámara de los Diputados italiana da luz verde al plan de ajuste económico y fiscal que permitirá al país ahorrar 79.000 millones de euros entre 2011 y 2014.
Por 314 votos a favor y 280 en contra y 2 abstenciones, entre las medidas aprobadas por la Cámara Baja, destacan el recorte de las pensiones y de los beneficios fiscales, así como el retraso de la edad de jubilación y el copago sanitario.
Este pistoletazo de la salida no era más que un trámite después de que este viernes el Gobierno de Silvio Berlusconi diera su voto de confianza al plan. De esta manera, se pretende poner fin a la inquietud de los mercados sobre la solvencia de las finanzas de Italia.
El texto no ha "sufrido enmiendas ni artículos adicionales", ha explicado el ministro para las Relaciones con el Parlamento, Elio Vito, por lo que su contenido es el mismo que ya aprobó el Senado este jueves.
Recortes hasta 2014
El plan de austeridad italiano pretende lograr el equilibrio en las cuentas públicas de un país que alberga una deuda superior al 120% de su Producto Interior Bruto (PIB), casi el doble que la de España. Para ello, los recortes se organizan en cuatro fases: 3.000 millones de euros para 2011, 6.000 millones de euros para 2012, y 25.000 y 45.000 millones de euros para 2013 y 2014, respectivamente, lo que deja el mayor peso de ahorro para la próxima legislatura.
Centra su afán de ahorro en los recortes a las pensiones y retraso a la edad de jubilación. En este sentido, las pensiones mayores de 90.000 euros al año sufrirán un recorte del 5% y del 10% las que superen los 150.000 euros. Por su parte, la jubilación se retrasará en un mes para aquellos que hayan cumplido los 40 años de cotización en 2012, de dos meses en 2013 y de tres meses en 2014.
Otra de las medidas prevé la introducción del copago en la sanidad, por lo que los italianos tendrán que pagar un mínimo de 10 euros para visitas con médicos especialistas y análisis, así como de 25 euros en los servicios de urgencias con el código blanco, es decir, sin gravedad.
También se prevé el pago de una tasa sobre los depósitos bancarios que será de 34 euros hasta los 50.000 euros, de 70 euros hasta los 150.000 y hasta llegar a los 1.100 que tendrán que pagar quienes tengan más de 500.000 euros.
Finalmente, alguna de las medidas más polémicas, debido a la consecuencia que tendrá para la economía familar italiana, es la reducción de los beneficios fiscales para asuntos como tener hijos a cargo.
No obstante, este último recorte no se aplicaría si el Parlamento llegara a aprobar antes del 30 de septiembre de 2013 el proyecto de ley marco de reforma fiscal. Este proyecto ya fue aprobado por el Gobierno el pasado 30 de junio y supondría el pago en dos años de 1.000 euros más de media de impuestos para las familias italianas.