La ONU declara el estado de hambruna en Somalia y lanza un llamamiento urgente de ayuda
- Casi 4 millones de personas están afectadas en dos regiones del sur del país
- Pide 210 millones de euros para "salvar vidas"
- La zona está controlada por una milicia integrista
La ONU ha declarado este miércoles oficialmente el estado de hambruna en dos regiones del sur de Somalia, Bakool y Baja Shabelle, algo inédito en este país durante los últimos veinte años. La organización ha pedido a la comunidad internacional 300 millones de dólares (algo más de 210 millones de euros) para "salvar vidas".
"Cada día que nos retrasemos en prestar asistencia es, literalmente, cuestión de vida o muerte para los niños y sus familias en las áreas afectadas por la hambruna", ha asegurado el coordinador de Asuntos Humanitarios de la ONU para Somalia, Mark Bowden, en una concurrida rueda de prensa en Nairobi.
"Si no actuamos ahora - ha advertido -, la hambruna se extenderá a las ocho regiones del sur de Somalia en los próximos dos meses debido a las pobres cosechas y a los brotes de enfermedades infecciosas".
Casi cuatro millones de afectados
Casi la mitad de la población somalí, unos 3,7 millones de personas, está en una situación de crisis humanitaria, de los cuales 2,8 millones residen en el sur, indican los datos facilitados por las Naciones Unidas.
La ONU ha aclarado que una hambruna se declara técnicamente cuando se combinan las siguientes variables: el índice de malnutrición aguda entre los niños supera el 30 por ciento; más de dos personas por cada 10.000 habitantes mueren al día y la gente carece de acceso a alimentos y otras necesidades básicas.
Bowden ha remarcado que en Somalia los índices de malnutrición "son actualmente los más altos del mundo", y que en algunas zonas de Bakool y Baja Shabelle se registran más de seis muertes diarias (por cada 10.000 habitantes) de niños menores de cinco años.
Además, las áreas más afectadas del sur de Somalia albergan a unos 310.000 niños que sufren malnutrición aguda, en la peor crisis alimentaria de África desde la hambruna que golpeó a ese país entre 1991 y 1992.
"Somalia afronta su peor crisis alimentaria de los últimos veinte años. Los próximos dos meses son cruciales. Es el momento de llevar a cabo una acción excepcional", ha añadido el coordinador.
Zona controlada por milicianos
El sur de Somalia se halla, prácticamente en su totalidad, bajo el control de la milicia integrista islámica Al Shabab, supuestamente vinculada a la red terrorista Al Qaeda. El pasado día 5, Al Shahab levantó el veto impuesto en 2010 a las organizaciones humanitarias para operar en sus dominios.
La sequía que azota al Cuerno de África y sus devastadores efectos mantienen contra las cuerdas a unos 11 millones de personas de la región, según coinciden en señalar las Naciones Unidas y las organizaciones no gubernamentales de ayuda humanitaria.
No obstante, la ONU no prevé que la hambruna se extienda más allá de Somalia en la región, pese a la situación de grave crisis alimentaria que padecen el sur de Etiopía y el norte de Kenia.