ACNUR advierte que 40.000 refugiados han llegado a Mogadiscio desde comienzos de mes
- En la capital somalí no hay suficientes víveres para los desplazados
- La escasez provoca enfrentamientos y saqueos
- El campo de Dadaab, en Kenia, está masificado
Unas 40.000 personas que huyen de la hambruna que se ha declarado en el Cuerno de África han llegado a la capital somalí, Mogadiscio, desde el comienzo del mes de julio. Según el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), los refugiados acuden a la ciudad en busca de agua y alimentos, pero las reservas de víveres son insuficientes.
"Alrededor de 30.000 han llegado al campamento a 50 kilómetros del centro de la capital", ha informdo Vivian Tan, portavoz de ACNUR. Unas 100.000 personas han llegado a Mogadiscio en los últimos dos meses, al ritmo de unas mil diarias.
"Esto provoca graves enfrentamientos y saqueos", ha advertido Tan. "El resultado es que muchas personas, en extremo débiles y vulnerables, se ven con las manos vacías a pesar de los esfuerzos de las agencias de ayuda humanitaria", ha lamentado.
Campos masificados
Desde Dadaab, un campo de refugiados en la frontera entre Kenia y Somalia, la enviada especial de TVE, Ángela Gonzalo, informa que entre 1.300 y 1.800 personas llegan cada día. Caminan hasta 20 días desde Somalia sin agua ni comida, un recorrido peligroso en el que se enfrentan además a robos, violaciones y secuestros.
Los que más sufren son los niños: un 17% de los menores de cinco años sufren malnutrición severa y un 20% deficiencias nutritivas. El campo de Dadaab está masificado, según informa la periodista de TVE.
Mientras tanto, Naciones Unidas ha insistido este martes en su llamamiento a los donantes para que ayuden a financiar una operación de emergencia para la que se necesitan 2.000 millones de dólares, de los cuales hasta ahora solo se ha recibido la mitad. Corine Momal-Vanian, portavoz de la ONU en Ginebra, ha declarado que la financiación es "urgente", pero ha expresado su escepticismo dado que en operaciones similares "no se entregó todo el dinero que previamente se había comprometido" por parte de los países.
La actual sequía en el Cuerno de África, la peor en 60 años, se ha cobrado ya decenas de miles de vidas y amenaza a 12 millones de personas en Somalia, Kenia, Etiopía, Djibouti, Sudán y Uganda.
La situación es particularmente grave en Somalia, donde la ONU ha declarado oficialmente el estado de hambruna en dos zonas del sur, controlado por los insurgentes de la milicia islamista Al-Shabab, que prohíben el acceso a algunas organizaciones humanitarias. La ONU, no obstante, ha anunciado que se dispone a comenzar el envío de ayuda a través de un puente aéreo y marítimo que está a punto de comenzar.