La Marcha Popular Indignada ya camina rumbo a Bruselas

• Tras acercar el movimiento a los pueblos, quieren hacerlo europeo
• Pretenden llegar el 15 de octubre a la capital belga
• Una semana después hay convocada una manifestación mundial

La marcha popular indignada ya camina rumbo a Bruselas

Media decena de personas de la Marcha Popular Indignada han salido, a las 18 horas, del kilómetro cero de la Puerta del Sol  para iniciar su andadura hacia Bruselas, tal y como se decidió  en la asamblea celebrada en el I Foro Social 15M, que tuvo lugar en  el parque del Retiro de Madrid.

Según han informado por 'Twitter', su primer encuentro será con la  Asamblea Popular de San Sebastián de los Reyes y harán noche en  Alcobendas. El reto final es llegar a Bruselas el 8 de octubre, una  semana antes de la manifestación mundial del 15 de octubre convocada  por Democracia Real Ya (DRY) y a la que se suman asambleas de todo el  mundo.

Junto a los españoles, asambleas de otros países de Europa también  están marchando hacia el corazón del gobierno de la Unión Europea. De  hecho, la Marcha pacífica de la indignación a Bruselas salió esta  mañana de Toulouse y también está previsto que el 11 de septiembre  salga otra marcha indignada desde Aachen, en Alemania, que pasará por  Holanda.

Ambas marchas culminarán el 17 de septiembre en una protesta ante   la sede de la Comisión Europea. La Marcha Popular Indignada, que  cuenta con un representante de Asamblea Sol y de miembros de otras  asambleas, como Barcelona o Cantabria, recalará ese día en París y lo  harán en apoyo a la iniciativa Occupy Wall Street, que explica Take the square.

Para combatir la "Gomorra financiera de América" (Wall Street),  pretenden que 20.000 personas acampen en el Bajo Manhattan con sus  tiendas, comida y barricadas pacíficas y ocupar la isla neoyorquina  por unos meses.

La decisión de acudir a Bruselas es la acción con la que culmina  este fin de semana con los "indignados" de toda España concentrados  en Madrid. El objetivo ahora, según dicen, es "exportar esa  conciencia, compartirla con otros países de Europa".