Los tanques de la fuerzas de Asad toman el centro de la ciudad de Hama tras un intenso bombardeo
- Testigos lo califican de "ataque final" y se desconoce si hay víctimas
- El Consejo de Seguridad sigue sin alcanzar un acuerdo
"Todas las comunicaciones han sido cortadas. El régimen está aprovechando que la atención de los medios está centrada en el juicio contra Hosni Mubarak, para lanzar su ofensiva final contra Hama". Así ha relatado, por telefóno a la agencia Reuters, el que es el cuarto día de ofensiva sin tregua contra esta ciudad siria.
En las mentes de los sirios, el fantasma del pasado en 1982, cuando perdieron la vida miles de personas. En este caso y concretamente este miércoles, según este testigo, los bombardeos se están concentrando en el distrito al-Hader.
Esta versión ha sido confirmada por el presidente del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abdul Rahman, quien ha informado a la agencia Efe por teléfono desde Londres que los tanques han ocupado el centro de esta ciudad de la que han bombardeado varias zonas.
Ofensiva sin tregua
Esta nueva operación se produce después de que el pasado lunes murieran en Hama cuatro personas y otras cinco fallecieran en distintas localidades de Siria, según los últimos datos facilitados por Rahman, que ha indicado que se desconoce si el ataque de este miércoles ha causado nuevas víctimas.
En cuanto a este ataque, el grupo opositor Comités Locales de Coordinación, ha señalado que los carros blindados bombardearon varias viviendas de Hama y que algunas de ellas se derrumbaron.
Algunos habitantes, según los Comités, están intentando huir de la ciudad y son tiroteados por las fuerzas de seguridad.
Desde hace cuatro días, coincidiendo con la víspera del inicio del mes sagrado de ramadán, las autoridades sirias han aumentado sus operaciones militares y causado más de un centenar de muertos en distintas partes de Siria, como las provincias de Idleb (noreste) y Rif Damasco (este).
La represión de las protestas, que comenzaron a mediados de marzo pasado, se ha cobrado la vida de más de 1.618 civiles y de 374 efectivos de las fuerzas de seguridad, según el Observatorio.