El presidente sirio admite errores en la represión y se compromete a iniciar reformas políticas

• Lo ha dicho en un encuentro con diplomáticos de Brasil, India y Sudáfrica
• También ha asegurado que revisará la Constitución

El presidente de Siria, Bachar Al Asad, se ha comprometido a impulsar reformas políticas en su país y ha admitido errores en la represión inicial a las protestas registradas en varias ciudades, según una declaración de los representantes de Brasil, India y Sudáfrica que se han reunido este miércoles con el gobernante en Damasco.

La declaración conjunta de los países del IBAS (India, Brasil y África del Sur) ha sido divulgada por la cancilleraía brasileña después de que los diplomáticos del grupo fueran recibidos en Damasco por el presidente sirio. Un encuentro que inicialmente estaba previsto en la visita de la misión, que intenta mediar en el conflicto que enfrenta al régimen sirio con la oposición.

Según la declaración del IBAS el presidente sirio les ha expresado "su compromiso con el proceso de reforma que busca establecer una democracia multipartidista, incluso mediante un cambio de la Constitución".

Bachar al Asad ha afirmado que "las reformas políticas están siendo consultadas con el pueblo de Siria y que el diálogo nacional proseguirá hasta alcanzar una nueva legislación y un modelo adecuado para la economía", agrega la declaración.

Se harán cambios en la Constitución para el próximo año

Según los diplomáticos del IBAS, el presidente sirio les ha manifestado que el proceso de revisión de la Constitución estará concluido entre febrero y marzo del próximo año.

La represión del régimen sirio a las protestas que se iniciaron el pasado marzo en diferentes ciudades sirias ha causado cerca de 2.000 muertos, según organismos de Derechos Humanos.

El fin del conflicto es precisamente el principal objetivo de la misión enviada por el IBAS, cuyos integrantes son actualmente miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Los tres se oponen a la aprobación de cualquier sanción o intervención en ese país, y defienden una negociación entre el gobierno y la oposición.