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Breivik llamó a la policía para entregarse y al no obtener respuesta siguió matando

  • El diario de Oslo 'Aftenposten' lo publica este viernes
  • Breivik realizó varias llamadas sin respuesta para entregarse
  • Tras la pausa continuó varios minutos con el tiroteo hasta ser capturado
  • Un superviviente fue retenido como sospechoso de prestar ayuda en el tiroteo
  • Una jurista realizará una comisión de 10 peronas que analizará el atentado

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Anders Behring Breivik, tras prestar declaración en un tribunal de Oslo.
Anders Behring Breivik, tras prestar declaración en un tribunal de Oslo.

El ultraderechista Anders Behring Breivik llamó en varias ocasiones a la policía para entregarse, pero al no obtener respuesta continuó con la matanza en el campamento juvenil de la isla de Noruega Utoya, segúan ha informado este martes el diario Aftenposten.

Su abogado, Geir Lippestad, ha declarado al diario noruego: "Bastante antes de ser capturado, llamó a la policía. Dice que llamó diez veces y que le respondieron dos".  De acuerdo con las declaraciones realizadas por el propio Breivik durante el juicio el pasado martes y miércoles, había mostrado su deseo de entregarse.

Asegura que recibió respuestas que no entendió y que pidió que lo llamaran de vuelta, de forma que le informaran de que su mensaje de rendición había sido recibido, según ha informado su abogado que insiste en que se escuchen las grabaciones del teléfono usado, supuestamente el de una víctima por que no encontraba el suyo.

Tras la pausa realizada para hacer la llamada telefónica y esperar a recibir una respuesta, la que nunca llegó, Breivik decidió continuar con los disparos hasta ser capturado minutos más tarde. Supervivientes de la matanza han relatado que hubo una pausa en el tiroteo que podría coincidir con la ya famosa llamada a las autoridades.

Por otra parte la policía noruega ha confirmado que la central del distrito de Buskerud sur recibió y grabó una conversación con Breivik. El doble atentado perpetrado por él el pasado día 22, murieron 77 personas , ocho de ellas por la explosión del coche bomba y el resto en el posterior tiroteo.

Según informa un testigo presencial a una televisión local, se vio a Breivik vestido de policía con casco y ropa de protección después de aparcar el coche bomba en el exterior de Hoyblokka. El hecho de que llevara una pistola, subiera luego a un vehículo civil y condujera en dirección contraria hizo que el testigo anotara la matricula que facilitó a la policía.

El jefe de seguridad de Hoyblokka, Jon Ivar Mehus, afirma que no es inusual que coches aparquen junto al complejo: "En principio un oche aparcado no es un peligro potencial"

Se produjeron detenciones por error

Otro medio noruego, el tabloide VG ha informado este viernes de que un superviviente de la matanza, menor de edad, permaneció retenido durante 17 horas después de los disparos, como sospechoso de ser ayudante de Breivik.

Después de permanecer bajo custodia policial en Utoya, fue trasladado a la comisaria de Honefoss. El interrogatorio nos e produjo hasta la mañana siguiente, sin la presencia de sua abogado, según ha confirmado la policía al diario, que admitió que su familia no fue informada por "error".

La "comisión 22 de julio" analizará los atentados

La jurista, Alexandra Bech Gjorv, será la encargada de dirigir la comisión para analizar los atentados de Oslo según ha anunciado este viernes el Gobierno noruego.

Debrá clarificar "todos los aspectos relevcantes de lo ocurrido, poner los hechos sobre la mesa, de forma honesta y sin maquillarlos" para que la seguridad aumente y no ocurran hehco similares, dijo el laborista Jens Stoltenberg.

No se tratará sin embargo de una comisión de investigación como tal y su tarea no será "analizar la toma de decisiones individuales" durante los hehco aclaró Gjorv.

El informe final de la "comisión final del 22 de julio", comoha sido bautizada, deberá serle entregada a Sstoltenberg el 10 de agosto del próximo año y será despueés cuando se puedan derivar "posibles consecuencias de los hechos" matizó el primer ministro.