Descubren el exoplaneta más oscuro del Universo
- Astrónomos descubren el exoplaneta más oscuro que se conoce
- Apenas refleja el 1% de la luz de su estrella
- Es un gigante gaseoso del tamaño de Jupiter
Los astrónomos de la NASA han descubierto un nuevo mundo sorprendente, un exoplaneta tan oscuro como el carbón.
El planeta, denominado TrES-2b, es un cuerpo gaseoso situado a 750 años luz de la Tierra y que tiene un tamaño similar al de Júpiter, pero su principal característica es que apenas refleja un 1% de la luz que emite su estrella.
"TrES-2b es considerablemente menos reflectante que la pintura acrílica negra, con lo que es un verdadero mundo alien", ha explicado David Kipping, del Centro de Astrofísica Havard-Smithsonian (CfA), en declaraciones recogidas por la NASA.
"No está claro que es lo qué hace que este planeta sea tan oscuro. Sin embargo, no es completamente negro. Está tan caliente que emite un tenue resplandor rojizo, como el de una brasa o una estufa eléctrica", afirma David Spiegel, codescubridor del planeta junto con Kipping.
Los investigadores saben que la atmósfera de TrES-2b contiene ciertos elementos químicos, como óxido de titanio, potasio o sodio vaporizado, que absorben la luz, pero estos compuestos no explican por sí solos la oscuridad del planeta.
Siempre muestra la misma cara hacia el Sol
El exoplaneta presenta otra curiosa característica, mientras orbita alrededor de su estrella siempre muestra su misma cara hacia su Sol, de forma similar a la Luna, que siempre nos muestra su mismo hemisferio.
Este anclaje orbital provoca que el brillo de su estrella apenas varíe, lo que se suele utilizar como método de detección y análisis de los exoplanetas.
“Los astrónomos detectaron el menor cambio de brillo jamás visto en un planeta“
"Combinando la precisión del Telescopio Kepler con las observaciones de más de 50 órbitas, detectamos el menor cambio de brillo jamás visto en un exoplaneta: Solo seis partes por millón", afirma Kipping. Estas extremadamente pequeñas fluctuaciones demuestran la oscuridad de TrES-2b.
La órbita de TrES-2b está situada a casi cinco millones de kilómetros de su estrella, una distancia mucho menor de la que separa Mercurio del Sol, que varía entre los 46 y los 70 millones de kilómetros.
Esta pequeña distancia provoca que el exoplaneta no posea nubes de amoniaco, algo que si tiene Júpiter y gracias a las cuales el gigante de los planetas del Sistema Solar refleja un tercio de la luz del Sol.