Mueren once soldados turcos en emboscadas de los rebeldes kurdos en la frontera con Irak
- Se ha producido una explosión al paso de un convoy
- En los últimos días ha habido enfrentamientos entre el Ejército y el PKK
- El primer ministro había anunciado operaciones militares contra los kurdos
Al menos once soldados turcos han muerto este miércoles al explotar una mina al paso de un convoy militar en la provincia de Hakkari, fronteriza con Irak, según informa la cadena CNN-Türk. Otros 14 habrían resultado heridos.
El atentado se ha producido en torno a las 9.00 horas (ocho de la mañana en España) en la carretera que comunica las localidades de Hakkari y Çukurca, una zona en la que es muy activo el grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). Este grupo armado, considerado terrorista por EE.UU. y la UE, ha reivindicado el ataque en un comunicado desde Irak, recogido por AFP.
De acuerdo con la cadena CNN-Türk, se había detectado una mina en la carretera. Acudió entonces un convoy militar para despejar la zona, momento que aprovecharon los rebeldes kurdos para hacer detonar varios explosivos caseros pero de gran potencia.
Seis soldados fallecieron en el acto y otro más tarde, cuando fue trasladado al hospital, mientras que otros tres cadáveres fueron localizados posteriormente.
En otra explosión, horas después, falleció un miembro de la Guardia Rural, un cuerpo paramilitar kurdo leal al gobierno de Ankara.
En la tarde del martes también se produjo una explosión junto a instalaciones militares en la localidad de Hakkari aunque no hubo víctimas.
En las últimas semanas el PKK ha incrementado sus ataques a objetivos militares y policiales turcos debido a la falta de resultados en las negociaciones entre el gobierno y el líder histórico de la organización armada, Abdullah Öcalan, encarcelado a perpetuidad en la isla prisión de Imrali.
Durante el fin de semana pasado, otros tres soldados fallecieron en un combate contra el PKK en la provincia de Sirnak, fronteriza con Siria e Irak. El lunes, tres soldados resultaron heridos por la explosión de una mina en la provincia oriental de Van y el martes un soldado turco murió en una emboscada del PKK en las montañas de la provincia sureña de Osmaniye.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha anunciado una nueva estrategia antiterrorista que, según publicaba este miércoles el diario HaberTürk, supondrá reducir los pasos burocráticos para incrementar la rapidez de respuesta a los ataques del PKK, implicar en la lucha a los gobernadores provinciales y aumentar el número de fuerzas especiales en las zonas "calientes".
En los últimos días, diversos columnistas turcos han avanzado que el Gobierno prepara una nueva ofensiva contra las bases del PKK en el norte de Irak, aunque por el momento no ha habido ninguna confirmación oficial