La FAO advierte que la hambruna se extenderá en Somalia si no se realizan inversiones
- Jacques Diouf pide sustituir las ayudas de emergencia por inversiones permanentes
- La realización de infraestructuras resulta imprescindible para prevenir las hambrunas
- 12 millones de personas se encuentran en peligro si no se pone una solución
El director general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), ha alertado este jueves de que la hambruna, que ya afecta a cinco regiones de Somalia, probablemente seguirá extendiéndose y llegará a otras zonas del país africano para finales de este mes.
Durante la cumbre que sobre la crisis alimentaria que vive el Cuerno de África ha sido convocada por la FAO en su sede de Roma, el director general de esta agencia de la ONU, Jacques Diouf, ha explicado que ayudas van llegando "lentamente" a las zonas afectadas y las necesidades inmediatas "van quedando progresivamente satisfechas".
Sin embargo, Diouf reconoce que "en las ultimas tres semanas la crisis en el Cuerno de África se ha deteriorado y agravado hasta llegar a ser dramática" y ha explicado como la hambruna se ha extendido y afecta ya a otras tres zonas de Somalia. El jefe de la FAO considera probable que para finales de agosto alcance a otras zonas del sur del país.
Diouf inauguró la cumbre con un discurso en el que ya no solo ha recordado que 12,4 millones de personas pueden morir de hambre en el Cuerno de África, sino que insistió también en la necesidad de dinero para hacer frente a la crisis. También ha recordado que "se dispone de planes de inversión ya aprobados, pero falta financiación,
Sin embargo, si los gobiernos y sus socios donantes no actúan ahora, la hambruna volverá y será una vergüenza para la comunidad internacional", ha dicho.
"Es nuestra responsabilidad ayudar a las poblaciones afectadas, pues es inadmisible que en nuestra época, con los recursos financieros, las tecnologías y los conocimientos que tenemos, más de 12 millones de personas puedan morir de hambre", ha insistido Jacques Diouf en su discurso.
Mirar al futuro
Después de que las organizaciones humanitarias hayan podido empezar a ejecutar sus programas de asistencia en la zona, incluida una Somalia en la que habían tenido grandes problemas de seguridad, la comunidad internacional mira ahora al futuro.
"Desde luego que hoy hemos de salvar vidas, pero debemos contribuir a la vez al desarrollo de modos de vida sostenibles para evitar catástrofes como estas en el futuro. Las poblaciones en el Cuerno de África han realizado esfuerzos loables, pero, hoy por hoy, sus recursos se han visto superados por la combinación de sequía, precios altos de los alimentos y conflictos", dijo Diouf.
La FAO considera que la actual crisis alimentaria del Cuerno de África, donde hay 2,3 millones de niños afectados por malnutrición (600.000 de modo grave), es también la consecuencia de tres décadas de inversión insuficiente en la agricultura y el desarrollo rural.
"Es importante, ante la previsión de la lluvia de octubre, que se lleve a cabo una repoblación estratégica de rebaños y apoyar la producción agrícola a pequeña escala, con el suministro de agua de riego, sistemas de riego, fertilizantes y técnicas adecuadas. Esto deberá extenderse hasta la temporada de lluvias en la primavera de 2012", ha explicado Diouf.
Una mayor implicación internacional
En la cumbre no han participado representantes gubernamentales de primer orden, a excepción de los ministros de Agricultura de los países afectados por esta crisis, para la que la FAO necesita 118,3 millones de dólares a fin de poder seguir prestando "apoyo inmediato" a la población necesitada.
Por su parte el ministro de Agricultura de Somalia, Abdullahi Hassan ha instado a los gobiernos y a las organizaciones internacionales para que "aumenten sus esfuerzos y se enfrenten al reto de la hambruna en Somalia. Podemos y debemos hacer más. Necesitamos más recursos, más coordinación y una mediación internacional urgente que haga frente a esta crisis humanitaria sin precedentes", ha dicho Abdullahi Hassan.
En este sentido, Sally Kosgei, titular de Agricultura de Kenia, uno de los países que soportan en mayor medida el flujo de desplazados de Somalia, pidió "asistencia porque los refugiados viven junto a personas que se están muriendo de hambre".
La peor sequía en décadas
La sequía en la región es la peor en 60 años y ha matado ya a decenas de miles de personas. Alrededor de 12 millones de personas en Somalia, Kenia, Etiopía, Yibuti, Sudán y Uganda están amenazadas. "La hambruna en Somalia se ha convertido en algo común. La gente se ha acostumbrado a ver las imágenes de niños que mueren, de un país que todavía está en crisis", se lamentó la directora de Operaciones de la FAO.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) insistió en su "tolerancia cero" hacia la malversación de las ayudas, después de que se denunciara la existencia de un supuesto mercado ilegal en Somalia con los suministros facilitados por este organismo de la ONU.Y la organización humanitaria Oxfam anunció que enviará a Mogadiscio 47 toneladas de material sanitario para hacer frente a la epidemia de cólera declarada en la capital somalí.
El pasado lunes la ONU lanzó un llamamiento de emergencia para conseguir más contribuciones al fondo de la lucha contra el hambre en el Cuerno de África. El montante que se estima necesario asciende a 2.400 millones de dólares de los que la organización ha recopilado, hasta el momento, 1.300 millones. Ayer miércoles, miembros de la Organización para la Conferencia Islámica (OCI) en Estambul, anunciaron que se comprometían a contribuir 350 millones de dólares para a Somalia.