El juez decreta la libertad provisional para el detenido que pretendía atentar en la marcha laica
- Tendrá que comparecer mañana y tarde en la comisaría y no salir de España
- La Audiencia Nacional le imputa un delito de amenazas
- El detenido asegura ante el juez que se trataba de una "broma"
La Audiencia Nacional ha decretado la libertad provisional de José Alvano Pérez Bautista, detenido el pasado martes por planear presuntamente atentar contra la marcha laica en contra de la visita del papa Benedicto XVI con motivo de la Jornada Mundial de la Juventut (JMJ).
El joven mexicano, de 24 años, tendrá que comparecer todos los días, mañana y tarde, en la comisaría del distrito de su domicilio, y no podrá salir de España.
El magistrado de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, a instancias del fiscal Luis Barroso, ha decretado en un auto la puesta en liberad de Pérez Bautista, que se había inscrito como voluntario de la Jornada Mundial de la Juventud de 2011 y al que imputa un delito de amenazas que están siendo investigadas por si podrían encajarse dentro de los delitos de terrorismo.
Además de fijar las comparecencias por la mañana y por la tarde, Andreu ha prohibido al detenido abandonar el territorio nacional, le ha retirado el pasaporte y le ha ordenado facilitar un domicilio y un teléfono en el que pueda ser localizado en cualquier momento.
El magistrado advierte al detenido, que se encontraba en España en situación de estancia por estudios en el Instituto de Química Orgánica General del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de que si no cumple con las medidas cautelares impuestas, ordenaría su ingreso en prisión provisional.
"Esta es mi lucha. A matar maricones"
Según recoge el auto, Pérez Bautista ha reconocido ser el autor de los mensajes emitidos entre los pasados días 9 y 11 a través del diario digital La voz libre, donde, bajo el 'nick' de "BAGMAN 69", había dejado mensajes como el siguiente: "Esta es mi lucha. A matar maricones y cualquier aberración antihumana durante sus manifestaciones en contra de la Iglesia católica".
"Soy trabajador de una importante industria farmacéutica en Madrid y puedo hacerme de suficientes sustancias peligrosas para boicotear las protestas antipapa", añadía en sus amenazas, que fueron puestas en conocimiento de la Policía a través de la colaboración ciudadana.
El detenido asegura que era una "broma"
El detenido ha reconocido ante el juez que decidió escribir esos mensajes pero ha dicho que los considera "una broma" y que lo hizo porque pensó que "así lograría frenar las adhesiones a la manifestación -que se celebró ayer por la tarde- y los comentarios favorables a la misma".
Para Andreu, el contenido de esos mensajes genera "una racional sensación de veracidad en la amenaza y su posible cumplimiento", y califica los términos de "amenaza grave e idónea para atemorizar a todos aquellos que tuvieran accesos a tales mensajes, máxime cuando los mismos se publican en un periódico digital, accesible para cualquier persona que se conecte a la red de Internet".
En el auto, el juez detalla que la Policía averiguó que la dirección IP desde la que se enviaron los mensajes correspondía a una titularidad del CSIC y tras ponerse en contacto con este organismo descubrieron que el usuario de la única máquina que tenía esa dirección era Pérez Bautista, que también la tiene instalada en su domicilio de la calle Velázquez.
El 11 de agosto, "BAGMAN 69" volvió a escribir un mensaje en el que pedía a la gente que no le diera dinero, sino "fertilizante, nafta, pólvora o cerillo o un mechero" con el "único fin de matar a esos perros maricones en su marcha antipapa", por lo que se le detuvo ante la inminencia de la celebración de la manifestación.
El juez Fernando Andreu ha sido el encargado de tomar declaración al joven porque está sustituyendo en vacaciones a su compañero Ismael Moreno, titular del Juzgado Central de Instrucción número 2, que autorizó el registro al domicilio del arrestado y a su lugar de trabajo en la sede del Instituto de Química Orgánica General.
El fiscal había pedido su puesta en libertad
El fiscal de la Audiencia Nacional Luis Barroso había solicitado la puesta en libertad con medidas cautelares del ciudadano mexicano José Alvano Pérez Bautista.
Tras el interrogatorio, que ha durado algo más de una hora, el representante del Ministerio Público ha imputado al joven un delito de amenazas contra un colectivo social o grupo de población, así como la obligación de que realice comparecencias judiciales dos veces al día (mañana y tarde), la prohibición de salir del territorio nacional, la retirada del pasaporte y la fijación de un domicilio y un número de contacto.
El fiscal ha defendido este criterio tras valorar que, a pesar de que el detenido estudiaba en el Instituto de Química Orgánica General del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), no tenía acceso a materias que pudieran haber resultado peligrosas.
Declaración ante el juez
En su declaración ante el juez Fernando Andreu, a la que ha acudido esposado y vistiendo una camiseta de color negro con un estampado del videojuego Pacman, Pérez Bautista ha alegado que todo se trató de "una broma, una ficción y una invención", según ha indicado su abogado, Antonio Ortiz.
“El plan no existe, era irreal, una broma de mal gusto“
"No tenía intención de realizar ningún ataque porque no tenía acceso a ninguna sustancia. El plan no existe, era irreal", ha añadido el letrado.
Andreu, que ha realizado esta declaración en sustitución del titular del Juzgado Central de Instrucción número 2, Ismael Moreno, decidirá sobre la situación procesal del detenido a primera hora de esta tarde tras realizar una vista del artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECR).
Instó a matar homosexuales
El peregrino mexicano, que realizaba labores de apoyo a los peregrinos en las instalaciones de IFEMA, levantó sospechas por los comentarios de corte radical que el detenido colgaba en un foro de internet, donde pedía "voluntarios" para su causa y detallaba las sustancias que contaba para llevar a cabo su plan.
Así, el pasado 9 de agosto afirmó que disponía de 200 litros de ácido clorhídrico y de unas 50 botellas de bromuro de bencilo con los que poder elaborar "una mezcla asfixiante". Además, aseguró poder hacerse esa misma noche con "unos cuantos kilos" de gas cloro "para esparcirlo en ampollas de 100 mililitros".
El propio detenido subrayó también en uno de sus comentarios su disponibilidad para conseguir dichos productos: "Soy trabajador de una importante industria farmacéutica en Madrid y puedo hacerme con suficientes sustancias peligrosas para boicotear las protestas antipapa".
En sus comentarios también animaba a matar homosexuales "en nombre de Dios" e incluso trató de reclutar a gente dispuesta a apoyarle en su objetivo obteniendo respuestas afirmativas, según sus palabras. A estos seguidores les facilitó un correo electrónico como contacto y les pidió que le facilitaran fertilizantes.