La justicia prolonga cuatro semanas la prisión preventiva para el autor de los atentados de Oslo
- Así lo ha dictado la justicia noruega
- Familiares de las víctimas de los atentados de Noruega visitan la isla de Utoya
- Viajan acompañados por médicos y psicólogos
- Breivik habló por teléfono co la Policía para entregarse
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Familiares de los fallecidos en el doble atentado de Noruega visitan este viernes la isla de Utoya, donde murieron 69 de las 77 víctimas mortales de los ataques, obra del fundamentalista cristiano y ultraderechista Anders Behring Breivik. Para él la justicia ha dictado cuatro semanas más en régimen de aislamiento total.
La isla, precintada desde el 22 de julio, cuando se produjo el tiroteo contra los asistentes al campamento de las juventudes socialdemócratas, quedará abierta para la visita de los familiares, en el primero de los tres días de luto nacional por la tragedia.
La visita se desarrolla sin cobertura mediática por decisión de las autoridades noruegas y para preservar la intimidad de los allegados de las víctimas. Los familiares han sido trasladados a isla, a unos 40 kilómetros de Oslo, en un barco militar, acompañados por policías, médicos y personal de asistencia psicológica.
La visita se produce exactamente cuatro semanas después de que Breivik, de 32 años y autor confeso de la matanza, cometiera el doble atentado, primero con la explosión de un coche bomba en el complejo gubernamental de Oslo, donde murieron ocho personas.
Cuatro semanas de prisión preventiva para Breivik
Según informaron el jueves fuentes policiales, Breivik mantuvo dos conversaciones telefónicas con la Policía antes de ser capturado y pidió entregarse.
En ambas llamadas, que se produjeron con un intervalo de casi media hora, fue Breivik el que cortó, y aunque luego un agente intentó llamarlo de nuevo, no tuvo éxito. Esta semana pasada Brevik ha visitado repetidamente la isla para reconstruir los hechos fuertemente custodiado por la policía.
Andres Behring Breivik se encuentra en régimen de prisión preventiva y continuará así cuatro semanas más por la orden dictada por la justicia noruega.