La candidata republicana Bachmann ve a Irene como un mensaje de Dios a Washington
- La miembro del Tea Party relaciona el huracán con el terremoto en Washington
- Los ve como mensajes de la divinidad al gasto del Gobierno federal
- La prensa se mofa de ella y su portavoz de prensa dice que bromeaba
"No sé que más tiene que hacer Dios para llamar la atención de los políticos. Tuvimos un temblor de tierra, ahora tenemos un huracán. Él ha dicho: ¿Váis a comenzar a escucharme?".
Estas palabras no han sido pronunciadas por ningún apocalíptico telepredicador, sino por una de las candidatas mejor situadas para enfrentarse a Barack Obama en las elecciones presidenciales de 2012 en Estados Unidos, la congresista ultraconservadora Michelle Bachmann.
Bachmann, que ganó unos comicios informales de Iowa al resto de candidatos republicanos, defendía que en realidad tanto el temblor de magnitud 5,8 que azotó Washington como el huracán Irene, que ha dejado 20 muertos en la costa este, son un mensaje divino... sobre la necesidad de adelgazar la administración pública.
"Escuchad al pueblo americano porque el pueblo americano está aullando ahora mismo. Saben que el Gobierno tiene obesidad mórbida y que tiene que frenar el gasto", añadía.
Críticas de la prensa
Su portavoz de campaña, Alice Stewart, ha asegurado que Bachmann hablaba en broma pero eso no ha evitado que la candidata republicana haya sido objeto de chanzas y críticas de la prensa estadounidense, que la han comparado con el telepredicador evangelista Pat Robertson.
"¡Ups! No es Pat Robertson explicando de forma ridícula que Dios ha creado un temblor de tierra o un huracán por el descontento con las finanzas del Gobierno. Es Michelle Bachmann, candidata a la presidencia", asegura el New York Magazine.
En un artículo titulado "Bachmann habla de Dios", el columnista del Washington Post Jonathan Capehart ha recordado que Bachmann ya había mencionado su candidatura a la presidencia como una voluntad divina y le ha recalcado que uno de los 10 mandamientos dice: "No tomarás el nombre de Dios en vano".
Bachmann es la candidata favorita de los conservadores sociales y los conservadores fiscales del Tea Party, que están logrando imponer su discurso en las primarias republicanas frente a posiciones más centristas.
Sin embargo, la aparición del gobernador de Texas, Rick Perry, como candidato ha oscurecido su estrella y se encuentra por delante de Bachmann en las encuestas, al igual que moderado Mitt Romney, que representa el ala más procapitalista del partido.