Cinco detenidos por altercados raciales en el barrio palmesano de Son Gotleu

• Todo comenzó con la muerte de un ciudadano nigeriano
• Se precipitó desde el quinto piso de un inmueble
• Según la Policía, pudo haberse precipitado de manera accidental

Enfrentamiento en un barrio de Palma entre ciudadanos de raza negra y de etnia gitana

La Policía Local ha practicado cinco detenciones y mantiene la vigilancia junto a la Policía Nacional en la barriada palmesana de Son Gotleu, después de que la muerte de un hombre de raza negra haya originado altercados raciales esta madrugada entre los vecinos y contra los agentes.

Durante la pasada noche fueron detenidos tres hombres por la Policía Local. Asimismo, en la mañana de este lunes, los altercados han vuelto a producirse y más de cincuenta personas se han dispersado por las calles de Son Gotleu reclamando justicia y venganza por el hombre muerto. Durante la mañana se han repetido los enfrentamientos con la Policía, y como resultado, dos personas han sido detenidas por la Unidad de Intervención Policial.

Fuentes de la Policía Nacional han informado que los cinco detenidos permanecen en los calabozos de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Palma.

"Calma tensa"

El portavoz de la Policía Local, Juan Luis Sánchez, describe la situación actual en Son Gotleu de "calma tensa", con algunos brotes esporádicos de violencia que son inmediatamente sofocados por las fuerzas de seguridad presentes en la zona, después de la noche de altercados que ha vivido este barrio palmesano.

Representantes de asociaciones de nigerianos han intentado calmar los ánimos a lo largo de la mañana para que no se reproducieran los incidentes, si bien a primeras horas de la tarde grupos de nigerianos se mantienen en la calle y son vigilados de cerca por numerosos efectivos policiales.

Todo comenzó alrededor de las 00.40 horas tras la muerte de un ciudadano nigeriano de 33 años, que se ha precipitado desde un quinto piso del inmueble situado en el número 58 de la calle Tomás Rul·lan de Palma. Varios vecinos denunciaron que el fallecimiento se había producido tras una pelea.

Según versiones de sus compatriotas, había sido lanzado desde la azotea de un inmueble de la calle Tomás Rullan por tres personas de etnia gitana, lo que es investigado por la Policía Nacional. Estos testigos afirman que el joven salió corriendo hasta el edificio situado frente a su casa huyendo de quienes lo seguían y llegó hasta la azotea, desde donde lo lanzaron a la calle.

Podría haberse precipitado de forma accidental

Sin embargo, la hipótesis que baraja con más fuerza el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional es que el joven estaba deslizándose de un balcón a otro de la finca cuando se cayó al vacío de forma accidental.

El hombre, informan desde la Policía, estaba "deslizándose voluntariamente" por la fachada de la finca, trepando de un piso a otro, entre un balcón y balcón, cuando al agarrarse a una tubería, ésta "cedió" y de "forma accidental se cayó al vacío".

La Policía descarta el suicidio y la intervención de terceras personas, por lo que, al contrario de lo que aseguraban miembros del colectivo nigeriano, la comunidad de etnia gitana no estarían involucrada en este suceso.

Una pelea posible origen del suceso

Cuando la Policía se personó en el lugar del suceso, un grupo de gente "muy nerviosa" rodeaba al fallecido y "todo ha ido derivando en un problema racial", con acusaciones a los agentes de "no detener a los gitanos e ir contra los negros", según el relato del portavoz de la Policía Local.

Los agentes intentaban comprobar el estado del hombre que se había precipitado y varios de los presentes les han indicado que "un blanco no puede tocar a una persona negra muerta".

Hasta 150 personas se han congregado en la zona y han ido contra la policía con lanzamiento de piedras, insultos y rotura de las lunas de coches estacionados, al tiempo que han llegado a quemar dos contenedores de basura y parcialmente dos turismos.

La Policía Nacional ha tenido que practicar cargas y hacer uso de material antidisturbios. La vigilancia se mantiene en Son Gotleu.

En agosto de 2009 ya hubo peleas entre nigerianos y personas de etnia gitana en el mismo barrio. En aquella ocasión, tres personas resultaron heridas por arma blanca y varias decenas más con contusiones en una pelea multitudinaria que llegó a congregar más de mil personas.