El Gobierno afgano niega las acusaciones de Naciones Unidas sobre el maltrato a presos

• El informe de la ONU registra "torturas sistemáticas" a los prisioneros
• El ministro de Interior afgano ha rechazado las acusaciones

El Gobierno afgano ha rechazado este miércoles las conclusiones de un informe de Naciones Unidas que todavía no se ha hecho público, según el cual en las cárceles de Afganistán se registra un maltrato generalizado a los presos talibanes.

De acuerdo con el estudio, las torturas a los reclusos insurgentes en las prisiones del país centro-asiático son "frecuentes" y de carácter "sistemático".

"Hemos compartido las conclusiones del informe con el Gobierno de Afganistán, incluyendo las fuerzas de seguridad, y les hemos solicitado que tomen las medidas oportunas de manera inmediata", ha explicado a Efe un portavoz de la ONU bajo anonimato. Pero en una rueda de prensa en Kabul, el ministro afgano de Interior, Bismilá Khan, ha rechazado estas acusaciones.

Khan ha recordado que las agencias de seguridad siempre han facilitado la visita a sus prisiones de miembros de organizaciones defensoras de los derechos humanos y de Naciones Unidas para que vean las condiciones en las que se hallan los detenidos.

"No ocultamos nuestros mecanismos de detención ante comisiones de derechos humanos, porque así tendremos un mejor conocimiento" de lo que ocurre en las cárceles, ha dicho en la misma comparecencia el director del Departamento de Seguridad Nacional, Rahmatulá Nabil.

Según algunos medios locales, la misión de la OTAN en Afganistán (ISAF) ha decidido detener por el momento la transferencia de algunos presos a las cárceles afganas debido al informe de la ONU, aunque Efe no ha podido confirmar este extremo.