La Fiscalía pide informes por la quema de una foto del rey y dos banderas durante la Diada
- Considera que podrían constituir un delito de injurias y otro de ultrajes
- Pueden afrontar penas de hasta dos años de cárcel
El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, ha solicitado a los Mossos d'Esquadra que le informen sobre la quema de una fotografía del Rey y sendas banderas de España y Francia que se produjo el pasado domingo durante una manifestación independentista que tuvo lugar en Barcelona con motivo de la celebración de la Diada.
En un oficio remitido este martes al consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña, Felip Puig, Zaragoza sostiene que estos hechos podrían"ser constitutivos de "un delito de injurias graves contra la más alta representación del Estado", penado con hasta dos años de cárcel, y otro de "ultraje a España", que el Código Penal castiga con una multa de 7 a 12 meses.
El representante del Ministerio Público en la Audiencia Nacional, que considera a este tribunal competente para investigar estos hechos en virtud de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), pide "a la mayor urgencia posible" información sobre estos hechos "en su condición de máximo responsable de la seguridad pública en ese territorio autonómica", así como de las actuaciones que han practicado los Mossos d'Esquadra.
De igual modo, le solicita que le remita "cuantas evidencias acrediten" la realización de los hechos que podrían ser considerados delictivos y que identifique a los "ejecutores materiales" de estos actos. "Todo ello --finaliza el escrito-- a los efectos de cumplir las funciones que la Constitución y las leyes nos encomiendan, y ejercer en su caso las acciones penales que sean pertinentes".
15 meses de prisión o 2.700 euros de multa, los precedentes de 2008
En julio de 2008 la Audiencia Nacional condenó por un delito de injurias a la Corona a los independentistas catalanes Jaume Roura y Enric Stern a 15 meses de prisión sustituibles por el pago de sendas multas de 2.700 euros por quemar fotografías de los Reyes en Gerona en septiembre de 2007.
Tres meses más tarde, en octubre de ese año, otros 16 jóvenes catalanes acusados de quemar fotocopias de fotografías del monarca en solidaridad con sus compañeros condenados fueron absueltos después de que la Fiscalía rebajara el delito imputado a una falta leve de alteración del orden público.