Mueren tiroteados cuatro niños tras el asalto talibán a un autobús escolar en Pakistán
- El conductor del vehículo también ha fallecido y hay otros 18 heridos
- El ataque se produjo primero con un cohete que no alcanzó el autobús
Al menos cuatro niños y el conductor del autobús escolar en el que viajaban han sido asesinados a tiros tras ser asaltados por desconocidos armados en la ciudad paquistaní de Peshawar.
Un comando talibán y ha afirmado que los niños formaban parte de una tribu progubernamental.
"Nuestros camaradas atacaron el autobús que transportaba a los niños de la tribu Aka Khel, cuya gente está luchando contra nosotros, a instancias del Ejército paquistaní", ha declarado el portavoz talibán Mohammed Afridi a la agencia Reuters a través de una conversación telefónica desde un lugar desconocido. "Se les ha dicho una y otra vez que se abstengan de cualquier actividad en contra de nosotros, pero no nos escucharon. Vamos a seguir llevando a cabo este tipo de ataques".
En la zona de Mattani han tenido lugar en estos meses varios atentados y explosiones, y los aldeanos creen que esas acciones son una represalia de los insurgentes por la decisión de los residentes de Kalakhel de formar una milicia tribal contra los talibanes.
"Primero cayó un cohete que no alcanzó el vehículo y, tras eso, varios hombres abrieron fuego" con rifles AK-47, ha explicado el portavoz de la policía de la zona, bastión talibán y donde se producen atentados muy a menudo.
Además, otros 18 personas han resultado heridas, entre ellas 15 escolares que han sido transportados a hospitales de la zona, situada no lejos de las zonas tribales donde tienen sus principales zonas de actuación los insurgentes talibanes y algunos militantes de la organización terrorista Al Qaeda.
Otros 20 jóvenes secuestrados
Los niños, con sus uniformes empapados de sangre, se quejan de las heridas de metralla y de bala. "Estábamos en la camioneta, volviendo a casa como todos los días. De repente oí una explosión y disparos", explica Sabir, de ocho años.
“Volvíamos a casa como todos los días y de repente oí una explosión“
En la frontera con Afganistán, los talibanes paquistaníes mantienen retenidos desde el pasado 31 de agosto a más de 20 jóvenes de otra tribu pastún a favor del Gobierno como moneda de cambio hasta que el Gobierno libere a decenas de presos y el grupo se comprometa a poner fin a las ofensivas contra ellos.
Tanto las áreas tribales como el noroeste de Pakistán están dominadas por la etnia pastún, de la que proceden tradicionalmente los insurgentes talibanes, activos tanto en ese país como, sobre todo, en el vecino Afganistán.
Los talibanes paquistaníes, considerados como la mayor amenaza de seguridad para el Gobierno, han incrementados sus ataques desde que su aliado Osama bin Laden fuera asesinado el pasado 2 de mayo por un comando de las fuerzas especiales de EE.UU. en Abbottabad, a 80 kilómetros de Islamabad.