Detenido un empleado del banco suizo UBS por causar pérdidas de 1.456 millones de euros
- El detenido en Londres es Kweku Adoboli, de 31 años, informa la cadena BBC
- El banco ha indicado que el presunto fraude ya está siendo investigado
- UBS ya ha perdido un 8,5% de su valor en la apertura del mercado bursátil suizo
El banco suizo UBS ha reconocido este jueves unas pérdidas de alrededor de 2.000 millones de dólares (1.456 millones de euros al valor actual) en operaciones no autorizadas de uno de sus operadores de la banca de inversión. Scotland Yard ha confirmado la detención a las 03.30 horas de la madrugada hora local (04.30 hora peninsular) de "un hombre de 31 años, bajo sospecha de fraude por abuso de su posición".
El detenido, identificado por los medios británicos como Kweku Adoboli, trabajaba en la división europea de gestión de capitales del banco suizo en Londres, en un fondo de inversión específico (Exchange traded fund). Según su perfil en la red de contactos profesionales Linkedin, estudió en la universidad inglesa de Nottingham.
UBS ha agregado que es posible que esta circunstancia introduzca una importante variación en los resultados del tercer trimestre de 2011 y ha adelantado la posibilidad de que se contabilicen pérdidas.
En una breve nota, la entidad ha asegurado que las operaciones no autorizadas no afectaron a las posiciones de ningún cliente. La información ha tenido un efecto inmediato en las acciones de la entidad, que había perdido un 8,5 % de su valor en los primeros minutos de actividad de la Bolsa de Valores de Zúrich.
Amenaza al banco de inversión
El agujero amenaza el banco de inversión de UBS que el jefe ejecutivo de la entidad, Oswald Gruebel, había puesto bajo revisión como parte de una amplia restructuración después de las fuertes pérdidas en la crisis de crédito y en el escándalo por las ayudas a clientes estadounidenses para eludir impuestos.
El banco suizo empleaba a casi 18.000 personas en su rama de inversión a finales de junio, la mayoría con base fuera de Suiza, particularmente en Londres y EE.UU.
"Esto es una demostración de que, a pesar de todos los sistemas inteligentes que los bancos tienen ahora, especialmente tras la crisis financiera, no se puede evitar que un individuo determinado se los salte cuando lo desee", ha declarado Chris Roebuck, profesor en la Cass Business School in London.
"Confirmará de nuevo a la mayoría de accionistas suizos de que la banca de inversión no es propiamente banca, al contrario que la privada", ha añadido.