Almunia cree que el riesgo de contagio de la crisis griega es "proporcional" a la lentitud europea
- Señala que el Fondo de rescates europeo es clave para frenar el contagio
- Considera que "los eurobonos hoy no son posibles"
El vicepresidente de la Comisión Europea Joaquín Almunia ha alertado este lunes de que el riesgo de contagio de la crisis griega es "proporcional" a la "lentitud" e "ineficacia" en la toma de decisiones en Europa y a la tendencia "abusiva" de algunos países miembros a actuar de forma unilateral.
Grecia ha reconocido que no cumplirá el objetivo de déficit fijado para 2011 y este lunes ha anunciado un incremento de su déficit público hasta el 172,7% del PIB en unas cuentas públicas para 2012.
"El riesgo de contagio es evidente" y crece a medida que se tarda en encontrar una "solución" para Grecia que "calme a los operadores y a los mercados", ha afirmado el comisario responsable de Asuntos Económicos y Monetarios de la UE en una conferencia en la Universidad de Alcalá de Henares.
En concreto, ha recordado que Irlanda y Portugal están sometidos a programas específicos de ayuda, mientras que otros como Italia, España y Bélgica pueden tener en el futuro "problemas de liquidez y de solvencia" que precisan una "barrera de protección".
El Fondo de rescates, clave para frenar el contagio
El "instrumento" clave para crear esta barrera es el fondo de rescate europeo (EFSF), que debe dotarse de instrumentos que le hagan "creíble", ha afirmado.
Por este motivo, ha confiado en que antes de la reunión del G-20 en Cannes (Francia), en las sucesivas citas de responsables de la eurozona, empezando por la del Eurogrupo de esta tarde, "la situación griega vaya poco a poco encontrando las respuestas urgentes que precisa" y que ya fueron aprobadas el pasado junio.
A su juicio, si se constata que las autoridades griegas están cumpliendo las condiciones del programa de ayuda "lo lógico" es que se desbloqueen los 8.000 millones de euros del segundo tramo de ayudas al país heleno.
Para el comisario, "afrontar ajustes en los países con déficit será imprescindible durante años" y requerirá "tenacidad y esfuerzos prolongados", que podrían estar apoyados por los países con superávit si éstos deciden utilizarlos para crear demanda y actividad, ha apuntado.
Además, ha insistido en que "la lentitud e ineficacia en la toma de decisiones se agrava con la tendencia al intergubernamentalismo, y al intento de algunos países de tomar ellos decisiones en ausencia de los demás y de las instituciones", ha lamentado Almunia.
El comisario ha reconocido que "Alemania toma decisiones con más lentitud de lo aconsejable" y ha subrayado que de haberse adoptado antes determinadas políticas "la dimensión de los problemas a abordar no hubiera sido tan grande".
En este país, junto a Francia, "hay una tentación continua de restringir el ámbito de decisión común y preferir reuniones paralelas donde supuestamente deciden cosas que luego además ni siquiera deciden", ha dicho.
Pero Almunia también se ha mostrado comprensivo con los países que han mantenido mayor disciplina fiscal en los últimos años y que ahora se resisten a ayudar a aquellos que se han desviado más de los objetivos.
“Los eurobonos no son hoy posibles“
Por eso, ha admitido que "los eurobonos no son hoy posibles" y tampoco un "tesoro único", aunque ha abogado por avanzar en el grado de confianza y por una mayor coordinación fiscal y presupuestaria.
También ha defendido que la reparación del sistema financiero europeo "va mas allá de la recapitalización", y es necesario superar los sistemas bancarios nacionales.
En definitiva, para Almunia los momentos "difíciles y decisivos" a los que se encuentra Europa necesitan "decisiones políticas de envergadura que marquen el inicio de una nueva etapa" que debe pasar, a su juicio, por el refuerzo de los mecanismos comunitarios.