Rehn llama a los países europeos a continuar con reformas "como las emprendidas por España"

• Insta a cumplir el objetivo de déficit del 3% fijado en el Pacto de Estabilidad
• Señala que no dudará en utilizar las herramientas para garantizar la disciplina fiscal

El comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha animado este lunes a intensificar la consolidación fiscal y continuar la senda de reformas estructurales emprendida por países como España. Los ministros de Finanzas de la zona euro se encuentran reunidos este lunes para debatir sobre el segundo rescate financiero a Grecia, acordado por los líderes de la zona euro el pasado 21 de julio y la puesta en marcha de la reforma del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera.

La incertidumbre de los inversores, tras reconocer Grecia que no cumplirá el objetivo de déficit fijado, ha hecho caer entorno a un 2% a las principales bolsas europeas.

Olli Rehn ha reconocido este lunes que la posibilidad de que Grecia no cumpla los objetivos de déficit fijados y ha evitado pronunciarse sobre si las medidas de ajuste llevadas a cabo hasta ahora por el Gobierno heleno serán suficientes para que pueda acceder a un nuevo tramo del primer rescate, de 8.000 millones de euros.

"Es esencial intensificar la consolidación fiscal y tomar decisiones sobre reformas estructurales que impulsen el crecimiento, como Italia y España han estado haciendo recientemente", ha señalado Rehn a su llegada al Eurogrupo, previo a la reunión de ministros de Finanzas de los Veintisiete de mañana.

Según el comisario, es importante que todos los Estados miembros cumplan sus objetivos fiscales y tomen medidas estructurales para impulsar el crecimiento.

Rehn ha advertido que no dudará en utilizar las nuevas herramientas que tendrá a su disposición, como las medidas de gobernanza económica, para garantizar la disciplina fiscal y un crecimiento equilibrado en Europa.

"Confío en que los estados miembros respeten las reglas", ha añadido y ha destacado la importancia de cumplir con las normas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que fija lo límites máximos de déficit en el 3% del PIB y de la deuda el 60%, como ha demostrado la crisis actual, para tener un crecimiento y empleo sostenibles en Europa.

El comisario ha indicado que nos encontramos en una "conyuntura crítica" por el estancamiento del crecimiento, la presión sobre la deuda soberana y la situación todavía vulnerable de los bancos.