El secretario de Defensa de EE.UU. califica de "error" congelar las ayudas a los palestinos
- El Congreso de EE.UU. ha suspendido la ayuda de 200 millones de dólares
- Panetta considera que "no es el momento adecuado"
El secretario de Defensa de EE.UU., Leon Panetta, ha calificado este lunes de "error" la decisión del Congreso estadounidense de suspender la ayuda de 200 millones de dólares a los palestinos en respuesta a su demanda de admisión en la ONU como estado miembro de pleno derecho.
En una conferencia de prensa conjunta en Tel Aviv con el titular de Defensa israelí, Ehud Barak, Panetta ha asegurado que "no es el momento adecuado" para congelar las ayudas, al entender que tanto israelíes como palestinos salen beneficiados de ellas, según ha informado el diario Yediot Aharonot en su versión digital.
Apoyo mutuo
Barak, que ha calificado a Panetta de "viejo amigo" suyo y de Israel, ha señalado también que su homólogo estadounidense "ha hecho mucho por reforzar los lazos especiales entre Israel y EE.UU. " y ha resaltado su compromiso con la seguridad de Israel como interés prioritario.
"Nos encontramos en medio de una lucha mundial contra el terrorismo en la que luchamos tanto desde dentro como fuera de nuestras fronteras y también lejos de ellas. Los (norte)americanos comparten parte de la carga en toda la región y en el mundo con éxito y nosotros les damos las gracias", ha declarado, según informa en un comunicado su oficina de prensa.
El ministro israelí también ha resaltado el apoyo "sincero y sin reservas" del presidente Barack Obama a Israel, y ha mostrado su esperanza de que la "relación especial que mantienen, basada en valores compartidos", continúe en el futuro.
Antes de aterrizar, Panetta ha advertido que Israel está cada vez más aislado en Oriente Medio, y ha instado al reinicio de las conversaciones de paz con los palestinos y a la mejora de las relaciones del Estado judío con Egipto y Turquía.
Israel aceptó el pasado domingo oficialmente el llamamiento del Cuarteto de Madrid (EE.UU., Rusia, UE y la ONU) al reinicio de negociaciones en el plazo de un mes, aunque con reservas, mientras que el liderazgo palestino reiteró su negativa a regresar a un proceso de paz mientras continúe la ampliación de las colonias en territorio ocupado y no se acepten como base negociadora las fronteras de 1967.