Mas deja sin paga extra de Navidad a los miembros del Govern catalán
- Afectatará a consellers y 350 altos cargos y ahorrá 1,8 millones de euros
- El anuncio se produce en plena polémica por los recortes sanitarios
El presidente catalán, Artur Mas, ha anunciado que este año, como signo de austeridad, los miembros de su Govern y los altos cargos de la Generalitat se quedarán sin la paga extra de Navidad "entera".
Fuentes de Presidencia han explicado a Efe que esta medida, sumando 350 altos cargos de la Generalitat -presidente, consellers, secretarios generales, directores generales y directivos de empresas públicas- supondrá un ahorro simbólico de 1,8 millones de euros.
En la sesión de control al presidente de la Generalitat en el pleno parlamentario de este miércoles, Mas ha revelado que en la reunión de ayer de su ejecutivo planteó esta idea. De hecho, el portavoz del Govern, Francesc Homs, dejó la puerta abierta a una rebaja de sueldo en las más altas instancias de la Generalitat, aunque aseguró que este tema no se había tratado.
Homs había salido al paso de la petición de representantes de las Juntas Clínicas de hospitales públicos para que diputados y altos cargos se bajen el sueldo.
Este gesto simbólico y ejemplarizante, que según ha recordado Mas se suma a la rebaja del 15 % del salario de los miembros del Govern que aplicó el tripartito meses antes de abandonar el poder, se produce en plena polémica por los recortes sociales.
Mas ha hecho este anuncio después de que el presidente del grupo parlamentario del PSC, Joaquim Nadal, le haya pedido un compromiso firme para cumplir las resoluciones aprobadas en el Parlament la semana pasada, algunas de ellas con el no de CiU.
El presidente de la Generalitat ha asegurado no tener "ningún inconveniente" en asumir este compromiso, siempre y cuando estas propuestas no signifiquen "poner más dinero", dada la grave situación de las finanzas de la Generalitat.
Herrera pide la dimisión del conseller de Salud
En la sesión de control, el presidente de la Generalitat ha tenido que defenderse una vez más de las críticas de la oposición por los ajustes, sobre todo, en sanidad. El más contundente ha sido el presidente del grupo parlamentario de ICV-EUiA, Joan Herrera, que ha llegado a sugerir la destitución del conseller de Salud, Boi Ruiz, y ha exigido apretar las tuercas a los más ricos para evitar unos recortes que llevan a la "fractura social".
La presidenta del PP de Cataluña, Alícia Sánchez-Camacho, por su parte, ha calificado de "inaceptable, indigna e insostenible" la situación del paro y ha instado a Mas a "actuar" en la línea de las resoluciones pactadas la semana pasada entre CiU y PPC.
El debate más agrio lo ha mantenido Mas con el diputado de Solidaritat Catalana per la Independència (SI) Uriel Bertran, que ha vinculado las "muertes" que a su juicio están provocando los recortes en sanidad con el "robo fiscal" de España sobre Cataluña.
Tras afirmar que le daría "vergüenza" repetir algunas de las palabras pronunciadas por Bertran, Mas le ha advertido de que con este tipo de discursos "no ganará ningún adepto a su causa" independentista, porque generan "miedo" a vivir en Cataluña.