Moody's rebaja la calificación de grandes empresas y bancos italianos
- Esta rebaja se produce un día después a la anunciada sobre la deuda italiana
La agencia de medición de riesgos Moody's ha anunciado su decisión de rebajar la califiación de grandes empresas italianas, como las energéticas Enel, Eni y Terna, así como de los dos mayores bancos del país, Unicredit e Intesa Sanpaolo. Esta rebaja se produce tan solo un día después de que la misma agencia rebajara la calificación de la deuda italiana en tres escalones (de Aa2 hasta A2) por los elevados niveles de deuda pública italiana.
Moody's también ha decidido revisar la nota del grupo aeroespacial y de electrónica de defensa Finmeccanica y la de Poste Italiane (Correos), mientras ha confirmado la calificación para la aseguradora Generali, aunque la situó en perspectiva negativa.
En concreto, la agencia estadounidense ha decidido degradar la nota de la deuda a largo plazo y de sus depósitos a Intesa Sanpaolo, que pasó de Aa3 a A2, mientras que en el caso de Unicredit la revisión fue de A3 a A2, ambos con perspectiva negativa.
En el caso de Unicredit, Moody's considera que el grupo deberá mejorar la rentabilidad de sus operaciones 'core' en Italia, al tiempo que señala que la actual situación económica, los bajos niveles de crecimiento y las medidas de austeridad adoptadas por el Gobierno italiano constituyen un obstáculo para el grupo en Italia y otros mercados.
Exposición directa a la deuda soberana
En cuanto a Intesa, la agencia de medición de riesgos señala la exposición directa de la entidad a la deuda soberana italiana, mientras subraya el hecho de que el grupo se ha concentrado en las actividades internas, ya que el 77% de las entradas del grupo son generadas en Italia.
La nota de la petrolera Eni, en la que el Estado italiano participa con más del 30 % del accionariado, pasó de Aa3 ad A1, debido a que, según Moody's, las posibilidades de que reciba un apoyo extraordinario del Gobierno se han visto reducidas de forma significativa, por lo que la agencia ha decidido evaluar solo su crédito de base.
La eléctrica Enel, accionista mayoritario de la española Endesa, sufrió una rebaja de su calificación de A2 a A3, por los mismos motivos atribuidos a Eni.
En el caso de Terna, la rebaja fue de A2 a A3, mientras que el recorte sufrido por Finmeccanica fue de A3 a Baa2, debido a la consideración de que la calidad del crédito se ha visto deteriorada.