Enlaces accesibilidad

El éxito del candidato de los 'indignados' marca la segunda vuelta de los socialistas franceses

  • La desmundialización de Montebourg logra el 17% de los apoyos
  • Hollande y Aubry cortejan a sus seguidores, más cercanos a ésta última

Por

Arnoud Montebourg, abogado especialista en la lucha contra la corrupción y portavoz de las ideas de los 'indignados',  se ha convertido en el principal juez de la segunda vuelta de las primarias de los socialistas franceses, al conseguir un sorpresivo 17% de apoyos que ahora cortejan los dos candidatos que se jugarán presentarse a las presidenciales en mayo de 2012, François Hollande y Martine Aubry.

Diputado de 48 años, su discurso en favor de la "desmundialización" y su programa "antiliberal" se ha ganado a los simpatizantes socialistas que acudieron en masa a la primera vuelta de las primarias, las primeras que se han celebrado a la "americana", es decir, que no se ha limitado a militantes.

Contra la globalización

Con este resultado, Montebourg, que fue el portavoz de la candidatura de Segolene Royal en 2007, se ganado sus galones como líder socialista.

"Es el único que tocó una música un poco diferente, los franceses fueron capaces de identificar una oferta específica en torno a la desmundialización, que en realidad encarna un camino muy diferente al que existe hasta ahora", analiza el politólogo Frederic Dabi.

A veces ridiculizado por su verbo aristrocratico, Arnaud Montebourg se considera como "el candidato de los indignados españoles", y ha prometido "pasar una ley de emergencia que ponga a los bancos bajo tutela" como su primera medida si fuese elegido presidente.

Propuestas como el impuesto del 0,1% de las transacciones financieras - que puede traer 250.000 millones de euros a la zona del euro, según él- y la separación de los bancos comerciales y bancos de inversión, también defendida por otros socialistas, han sido capaces de atraer a un electorado cansado de escuchar que hay un margen de maniobra limitado de los gobiernos en una economía globalizada.

Curiosamente su postura de la globalización, tema principal de su campaña, le ha aproximado al otro extremo del espectro ideológico, ya que la candidata del ultraderechista Frente Nacional, Marine Le Pen, ha considerado que Mountebourg es el que se encuentra más cercano a su posición.

Condicionamiento a los candidatos

El éxito de Mountebourg, que aún no ha anunciado a quién apoyará, condiciona la segunda vuelta de las primarias, que se celebrará el próximo viernes y sobre todo el discurso centrista del principal favorito, François Hollande, que venció con un 39% de los apoyos frente al 31% de Martine Aubry, que encarna la izquierda tradicional y que se considera la probable destinataria de los apoyos de Montebourg.

De esta forma, Hollande, que hasta ahora se ha mostrado partidario de una mayor integración europea y de reducir el déficit, tendría que girar más a la izquierda para asegurar una elección que hasta ahora se daba por hecha pero que ahora podría correr peligro.

"A un mensaje se le ha dado voz a través de Arnoud Montebourg, un  deseo de protección de la globalización y mucha más moralidad en la  vida política. Lo escucho", ha declarado Hollande este lunes en una  entrevista a la emisora de radio RTL.

"Dado el gran resultado de Montebourg ayer es probable que esté en el  centro de atención", ha asegurado el partidario de Aubry Bruno  Juillard, que considera que su candidata atraerá fácilmente a los que  apoyan a Montebourg.

"Las cosas están básicamente muy abiertas, es más complicado que antes", ha declarado el analista François Miquet-Marty de la empresa de encuestas Viavoice, que ha matizado que no está claro a quién van a votar los seguidores de Montebourg.

"Montebourg está más cercano ideológicamente a Aubry pero las personalidades también cuentan. Este periodo entre las dos rondas es crucrial, todo va del equilibrio entre la identidad de izquierdas y la credibilidad. Hollande va a tener que mostrar que él pertenece a la izquierda", ha añadido.

En la misma línea se ha pronunciado la prensa francesa.

"El muy buen resultado de Arnaud Montebourg, que defendió la desglobalización y una línea que está a la izquierda de la izquierda, le ha dado una influencia real en el perfil ideológico y político del vencedor", ha subrayado en un editorial el diario izquierdista Liberation.

Favoritos para las presidenciales

La izquierda se encuentra bien situada en las encuestas -y especialmente Hollande- para acabar con el dominio del Elíseo de la derecha en las presidenciales de mayo de 2012, debido a los deseos de cambio expresados por los franceses, desilusionados ante el estancamiento económico.

El escándalo sexual del que era el principal favorito para las primarias y para las presidenciales, el exdirector gerente del Fondo Monetario Internacional, Dominique Strauss-Kahn, hizo bajar los ánimos de la izquierda pero la histórica victoria en el Senado de hace unas semanas ha vuelto a colocar a los socialistas en la cresta de la ola.

Mientras, Sarkozy, centrado esta semana en encontrar una salida a una crisis de deuda soberana en la zona euro que podría provocar una nueva recesión global, no se espera que anuncie su intención de presentarse a la reelección hasta finales de este año.

Muchos de los que le apoyaron por su estilo realista y su mensaje de cambio en 2007 le critican su hiperactividad y su forma impulsiva de hacer política, así como su ansia de popularidad, resumida en la expresión de "presidente bing-bing".