El Supremo indio suspende la pena de muerte para el condenado por los ataques de Bombay
- Mohamed Ajmal Amir Kasab fue condenado en mayo de 2010
- Se le acusa de asesinao, acto de guerra, complot y terrorismo
- Es el único superviviente del comando que perpetró la matanza
El Tribunal Supremo de la India ha suspendido la condena a muerte del único superviviente del comando terrorista responsable de los atentados de Bombay en 2008, que de jaron 166 muertos.
La apelación presentada por Mohamed Ajmal Amir Kasab, un paquistaní de 23 años, "debe ser examinada con toda prioridad" dada la importancia del caso, ha declarado el juez de la Corte Suprema, Aftab Alam.
Nikam Ujjwal, el abogado que representa los intereses del Estado de Maharashtra, del que Bombay es la capital, la decisión de la Corte Suprema puede parecer "inesperado" dada las abrumadora pruebas en contra del acusado, pero "no es inusual"en los casos de los condenados a muerte.
Kasab, condenado a muerte por un tribunal de excepción en mayo de 2010 por asesinato, acto de guerra contra la India, complot y terrorismo, era el único acusado superviviente del comando terrorista. Los otros nueve miembros murieron a manos de las fuerzas de seguridad indias.
Si el Tribunal Supremo confirma su culpabilidad en los atentados y su condena a muerte puede solicitar como última alternativa el indulto presidencial.
En India la última ejecución en la horca tuvo lugar en 2004 y la anterior fue en 1998.
Entre el 26 al 29 noviembre de 2008, un comando de diez hombres fuertemente armados entró en hoteles de lujo, un restaurante turístico, la principal estación de tren y un centro judío en Bombay, en un ataque bautizado como el "11 de septiembre indio" y donde 166 personas murieron y más de 300 resultaron heridas.
Pruebas abrumadoras
El paquistaní fue identificado en una grabación en la principal estación de tren de la ciudad llevando un rifre AK-47 y una mochila a su espalda, según detallaron los fiscales en el juicio. Alrededor de 60 personas fueron asesinadas a tiros en ese lugar.
En el juicio, la Fiscalía presentó pruebas abrumadoras en su contra, alegando la presencia de huellas dactilares, muestras de ADN o de los testimonios directos de personas que detallaron cómo había abierto fuego y lanzaron granadas contra la multitud.
Kasab, que fue herido por la Policía y arrestado en la primera noche de los ataques, primero reconoció su participación y luego dijo que le tendieron una trampa.
En el juicio en primera instancia, el juez que emitió la sentencia aseguró que Kasab que " deberá ser colgado por el cuello hasta que muera".
Asimismo, el magistrado declaró que la pena debía ser proporcional al crimen y que la pena de muerte era necesaria para que el público confie en el sistema judicial indio."
India culpó de los ataques al grupo extremista Lashkar-e-Taiba (LeT) instalado en Pakistán y por ello después de los ataques las relaciones entre los dos países entraron en una etapa de más tensión aún, que llevó a interrumpir las conversaciones de paz iniciadas en 2004.
Sin embargo, los dos países anunciaron en febrero que acordaron reanudar las conversaciones de paz y ya han tenido lugar varias reuniones de alto nivel en Nueva Delhi e Islamabad.