La Junta Militar egipcia niega que el ejército disparase a los cristianos coptos
- Representantes de la comunidad cristiana exigen la dimisión del gobierno
- El papa Benedicto XVI ha condenado el episodio de violencia
- El ejército reprimió una manifestación en la que murieron 25 personas
La junta militar que gobierna Egipto ja negadop que el ejército hubiese utilizado armas de fuego contra los manifestantes coptos (cristianos egipcios) durante los disturbios del domingo pasado en El Cairo, que causaron al menos 25 muertos.
"Si el ejército hubiera utilizado armas de fuego, las consecuencias habrían sido desastrosas", ha afirmado un portavoz castrense durante una rueda de prensa.
Los coptos exigen la dimisión del Gobierno
Representantes de la comunidad cristiana en Egipto han rechazado este miércoles la actuación de las autoridades en la crisis desencadenada por la reciente muerte de manifestantes coptos y han exigido la dimisión del Gobierno.
El presidente de la Organización General de los Coptos en Egipto, Sherif Doss, ha acusado en rueda de prensa al Ejecutivo liderado por Esam Sharaf de "ser incapaz de controlar los últimos sucesos en el país", por lo que ha considerado que éste ha perdido la confianza de su comunidad.
Doss ha lamentado los infructuosos intentos de las asociaciones cristianas de reunirse con el Consejo de Ministros desde la renuncia del presidente Hosni Mubarak el pasado 11 de febrero.
"Queremos mostrarle (al Gobierno) nuestros problemas claramente pero hasta ahora éste no ha puesto en marcha sus promesas con seriedad", ha manifestado el jefe de la organización de los coptos egipcios, que representan una décima parte de la población del país y son miembros de una de las iglesias más antiguas de Oriente.
El pasado martes el viceprimer ministro Hazem Beblawi presentó su dimisión ante la Junta Militar que dirige el país desde la caída de Mubarak, si bien esta se negó a aceptarla en un momento crítico para la transición democrática.
El papa Benedicto XVI denuncia la actitud del ejército
El papa Benedicto XVI ha denunciado los intentos de minar la coexistencia pacífica entre las comunidades religiosas en Egipto y ha destacado los esfuerzos de la autoridades en favor de los derechos humanos y de las minorías.
Ante varias decenas de miles de personas que han asistido en la plaza de San Pedro del Vaticano a la audiencia pública de los miércoles, el papa ha afirmado que la coexistencia pacífica entre las comunidades egipcias es "esencial para salvaguardar la transición".
"Me siento profundamente entristecido por los episodios de violencia ocurridos el pasado domingo en El Cairo. Me uno al dolor de las familias de las víctimas y de todo el pueblo egipcio desgarrado por los intentos de minar la coexistencia pacífica entre sus comunidades, que sin embargo es esencial para salvaguardar en estos momentos la transición", afirmó el papa.
El papa ha apoyado "los esfuerzos" de las autoridades egipcias, civiles y religiosas "en favor de una sociedad en la que sean respetados los derechos humanos de todos, en particular de las minorías, "en beneficio de la unidad".
Tras conocerse los disturbios del pasado domingo en El Cairo entre militares y cristianos coptos ortodoxos, en los que murieron 25 personas y más de 200 resultaron heridas, varios altos cargos del Vaticano han condenado la violencia.